Comenzaron las tareas de rescate del superyate Bayesian, hundido en Sicilia hace casi un año
La nave, considerada “el Titanic de los superveleros”, fue azotada por una tormenta en las costas italianas de Porticello en agosto de 2024. En el naufragio murieron siete personas
La compañía TMC Maritime, responsable de la operación, informó que el proceso de izamiento comenzó hace tres días, primero con el objetivo de sacar el barco lentamente del fondo marino, a unos 50 metros de profundidad, para que las correas de elevación de acero, así como las eslingas y arneses, pudieran asegurarse con firmeza bajo la quilla.
Se trató de una medida esencial para que el casco del barco pudiera colocarse en una posición casi vertical y lograra emerger, explicó.
Para ello, se emplearán ocho grandes correas de acero, que mantendrán el casco en posición vertical para integrarse a un sistema de cables de elevación, con el que comenzará el proceso de izado definitivo del barco. A medida que la nave ascienda, los rescatistas bombearán agua de mar fuera del casco, procurando estabilizarlo.

Luego, durante el fin de semana, el personal de TMC Maritime lo mantendrá elevado fuera del agua para someterlo a inspecciones y avanzar con las preparaciones previas a su traslado final hacia el puerto siciliano de Termini Imerse, este domingo.
Las autoridades italianas mantienen abierta la investigación penal sobre este naufragio, ocurrido mediados de 2024.
El hundimiento del yate ocurrió el 19 de agosto frente a la localidad de Porticello, cerca de Palermo, en medio de una violenta tormenta. Ese día, Mike Lynch se había embarcado con amigos y familiares para celebrar su reciente absolución en un juicio por fraude en Estados Unidos.
Sin embargo, por el paso de una tormenta, la nave acabó en el fondo del mar, provocando la muerte del empresario, su hija y otras cinco personas a bordo, mientras que 15 tripulantes y pasajeros lograron sobrevivir, entre ellos el capitán y todos los miembros del personal, salvo el chef.
Un informe provisional publicado el mes pasado por los investigadores británicos expuso que el yate había sido volcado por un “viento extremo” y que, tras ello, no había podido recuperar su estabilidad.
“La velocidad del viento superó los 70 nudos (130,3 km/h) en el momento del hundimiento y volteó violentamente la embarcación a un ángulo de 90 grados en menos de 15 segundos”, detalla el documento.
El texto también suma que la tripulación del Bayesian había seleccionado la ubicación precisa del naufragio como un refugio frente a la tormenta eléctrica que había sido pronosticada para esa jornada, pero las condiciones meteorológicas superaron cualquier previsión y el temporal sumió a la embarcación en una situación insalvable.