La Justicia brasileña investigará a un hijo de Jair Bolsonaro por una campaña contra el país
Un juez de la corte suprema de Brasil ordenó este lunes abrir una investigación contra un hijo del ex presidente Jair Bolsonaro
El diputado tiene excelentes relaciones con los círculos de la ultraderecha estadounidense y se ha valido de su acceso al entorno del presidente, Donald Trump, para intentar promover algún tipo de sanciones contra el magistrado Alexandre de Moraes, miembro de la Corte Suprema y relator del juicio por golpismo contra Jair Bolsonaro.
La semana pasada, durante una comparecencia del secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, al Parlamento, el diputado republicano Cory Mills le preguntó si el Gobierno de Donald Trump ha considerado la posibilidad de sancionar al magistrado brasileño por supuestas violaciones de los derechos humanos.

“Hay una gran posibilidad”, respondió el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, en una escena que Eduardo Bolsonaro ha reproducido en sus redes sociales.
El fiscal general, Paulo Gonet, solicitó al presidente del Supremo Tribunal Federal “la apertura de una investigación” contra el diputado por “amenazas” hacia los jueces, fiscales y policías, según el pedido oficial fechado el domingo y al que accedió la AFP.
En el documento en que pide investigar el asunto, la Fiscalía dice que “hay un manifiesto tono intimidatorio para quienes actúan (en Brasil) como agentes públicos, de investigación o acusación”, así como para los “juzgadores de la acción penal” por golpismo que se sigue contra el ex presidente Bolsonaro.
Las “evidencias”, según la Fiscalía, “conducen a la hilación de que la búsqueda de sanciones contra miembros del Poder Judicial apunta a interferir en el trámite regular de procedimientos de orden criminal, e inclusive de acción penal, en curso contra Jair Bolsonaro y sus aliados”.
Poco después del pedido del fiscal, el juez del Supremo Tribunal Federal Alexandre de Moraes determinó abrir una investigación contra Eduardo Bolsonaro por presunta “coacción” y obstrucción de investigación.
Bolsonaro y una treintena de sus más cercanos colaboradores responden ante el Supremo por supuestas conspiraciones para impedir la toma de posesión del actual mandatario, Luiz Inácio Lula da Silva, después de su victoria en las urnas en octubre de 2022, cuando derrotó al líder de la ultraderecha, que aspiraba a la reelección.
Según la acusación, esa conspiración habría desembocado en la asonada del 8 de enero de 2023, una semana después de la investidura de Lula, cuando miles de bolsonaristas destrozaron las sedes del Supremo, el Congreso y la Presidencia para incitar una intervención militar que derrocara al nuevo Gobierno.