Medidas clave para prevenir el norovirus, el COVID-19, la gripe y el VSR en esta temporada de enfermedades en EEUU
Durante los meses de invierno, las afecciones virales incrementan debido a la mayor permanencia en espacios cerrados y al descenso de temperaturas, lo que favorece la transmisión de patógenos
InfobaeDurante los meses de invierno, las enfermedades respiratorias y estomacales tienden a incrementar debido a factores como el aumento de actividades en interiores y el aire seco. Estas condiciones facilitan la propagación de virus como la gripe, el COVID-19, el virus respiratorio sincitial (VSR), el norovirus y el resfriado común, según información desde el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).
Conocer los síntomas más comunes y adoptar medidas preventivas es esencial para reducir el impacto de estas enfermedades. A continuación, se presentan información clave y recomendaciones respaldadas por fuentes como el CDC, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Associated Press (AP).
Síntomas comunes de enfermedades respiratorias y estomacales
El norovirus, una infección estomacal causada por alimentos o superficies contaminadas, provoca vómitos, diarrea, náuseas y dolor abdominal durante uno a tres días, según un informe de Associated Press (AP).
Por su parte, el resfriado común, generado por diversos tipos de virus, ocasiona congestión nasal, tos, estornudos, dolor de garganta y fiebre leve por menos de una semana, conforme a datos de la AP y el CDC.
El COVID-19 puede provocar fiebre, escalofríos, dificultad para respirar, pérdida de olfato o gusto, fatiga, dolor de cabeza y náuseas. La duración de los síntomas varía, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El RSV afecta principalmente a niños y adultos mayores. Los síntomas incluyen congestión nasal, tos, estornudos, fiebre y falta de apetito, con una duración de hasta dos semanas, según un reporte del CDC.
Cómo prevenir enfermedades respiratorias y estomacales en invierno
El lavado frecuente de manos es fundamental para prevenir enfermedades como el norovirus, la gripe, el COVID-19 y el RSV, de acuerdo con el CDC. Lavarse las manos con agua y jabón durante al menos 20 segundos, especialmente después de usar el baño o preparar alimentos, puede reducir significativamente el riesgo de contagio. En caso de no tener acceso a agua y jabón, se recomienda utilizar desinfectantes de manos con al menos 60% de alcohol, aunque estos no eliminan el norovirus.
Consejos para limpiar y desinfectar superficies contra virus
La limpieza y desinfección de superficies también es esencial. El CDC sugiere desinfectar superficies contaminadas con alimentos o fluidos corporales con soluciones de cloro o productos aprobados por la Agencia de Protección Ambiental (EPA). Para virus respiratorios como la gripe y el resfriado, se deben limpiar regularmente objetos de uso frecuente como perillas de puertas, interruptores de luz y teléfonos.
Uso de mascarillas y vacunación contra enfermedades virales
El uso de mascarillas, particularmente en lugares concurridos, puede reducir la transmisión de virus respiratorios, según recomendaciones del CDC y la OMS. Mascarillas N95 o de grado médico ofrecen protección adicional contra el COVID-19 y la gripe.
Vacunas actualizadas contra el COVID-19 están disponibles para todas las personas elegibles, y el CDC recomienda la vacuna contra la gripe anualmente para mayores de seis meses. Asimismo, las personas mayores de 60 años y mujeres embarazadas pueden considerar la vacuna contra el RSV, según información del CDC.
Qué hacer si ya tiene síntomas de enfermedad
Si una persona presenta síntomas, debe permanecer en casa para evitar contagiar a otros, según el CDC. Realizar pruebas para determinar si se trata de COVID-19 o gripe es crucial, ya que existen tratamientos como Paxlovid para COVID-19 y Tamiflu para la gripe que pueden reducir la severidad de los síntomas.
Para el resfriado, la gripe o el COVID-19, se recomienda descansar, consumir líquidos y utilizar humidificadores para aliviar los síntomas, según la AP. En el caso del norovirus, la rehidratación es fundamental, especialmente si se presentan signos de deshidratación como boca seca, mareo o reducción en la frecuencia urinaria.
Importancia del descanso y la hidratación para reforzar el sistema inmunológico
El sistema inmunológico puede debilitarse debido a la falta de sueño, el estrés y la deshidratación, según la OMS. Por ello, mantenerse hidratado, dormir lo suficiente y evitar el agotamiento son medidas clave para mantener las defensas del organismo activas.