Reino Unido estudia obligar a las empresas a revelar la brecha salarial entre etnias
Los asiáticos, negros y otros grupos étnicos tienen mucha más probabilidad de tener un sueldo bajo. Las autoridades buscan repetir las medidas contra las diferencias de género
Infobae
El Gobierno británico abrió un periodo de consultas en el que se evaluará la posibilidad de obligar a las empresas a revelar la brecha salarial entre etnias, después de que ya se hiciera lo mismo con las discrepancias por género.
Al presentar el periodo consultivo, la primera ministra británica, Theresa May, señaló que las minorías étnicas a menudo se sienten "como si hubieran topado con un muro" en el entorno laboral.
La consulta, que durará hasta el próximo enero, permitirá a las partes interesadas opinar sobre qué tipo de información consideran que debería hacerse pública, "sin que suponga una carga excesiva para las empresas", dijo May.
La Auditoría de disparidad racial, publicada el año pasado, reveló grandes discrepancias entre las personas de raza blanca y el resto de las razas que conviven en el Reino Unido en ámbitos como la educación, el empleo, la salud y la delincuencia.
Entre otras cosas, halló que solo un 1 % de policías no blancos ocupan cargos de responsabilidad.
Dentro del servicio nacional de salud (NHS, en inglés), se descubrió que un 18 % de solicitantes de empleo de raza blanca preseleccionados conseguían el trabajo anunciado, frente al 11 % de los de minorías étnicas.
"Nuestro objetivo es asegurarnos de que las organizaciones, consejos de administración y equipos directivos en el Reino Unido verdaderamente reflejan los entornos laborales que manejan, y las medidas que tomamos hoy ayudarán a las empresas a identificar las iniciativas necesarias para crear una fuerza laboral más justa y diversa", afirmó la jefa del Gobierno.
May también presentó el Estatuto de la raza en el trabajo, que ya ha sido suscrito por el NHS y empresas como KPMG o Saatchi & Saatchi y que compromete a los firmantes a impulsar la contratación y progresión laboral de los empleados de minorías étnicas.
El director de políticas de la patronal empresarial CBI, Matthew Fell, dijo que "la transparencia puede ser un motor para la acción a la hora de abordar la brecha salarial étnica", igual que ya sucedió con la brecha de género.
El pasado abril entró en vigor el requisito gubernamental que obliga a las compañías de más de 250 trabajadores a informar sobre la brecha salarial entre hombres y mujeres, lo que incitó un debate nacional al revelarse enormes diferencias en todos los sectores.
Infobae
El Gobierno británico abrió un periodo de consultas en el que se evaluará la posibilidad de obligar a las empresas a revelar la brecha salarial entre etnias, después de que ya se hiciera lo mismo con las discrepancias por género.
Al presentar el periodo consultivo, la primera ministra británica, Theresa May, señaló que las minorías étnicas a menudo se sienten "como si hubieran topado con un muro" en el entorno laboral.
La consulta, que durará hasta el próximo enero, permitirá a las partes interesadas opinar sobre qué tipo de información consideran que debería hacerse pública, "sin que suponga una carga excesiva para las empresas", dijo May.
La Auditoría de disparidad racial, publicada el año pasado, reveló grandes discrepancias entre las personas de raza blanca y el resto de las razas que conviven en el Reino Unido en ámbitos como la educación, el empleo, la salud y la delincuencia.
Entre otras cosas, halló que solo un 1 % de policías no blancos ocupan cargos de responsabilidad.
Dentro del servicio nacional de salud (NHS, en inglés), se descubrió que un 18 % de solicitantes de empleo de raza blanca preseleccionados conseguían el trabajo anunciado, frente al 11 % de los de minorías étnicas.
"Nuestro objetivo es asegurarnos de que las organizaciones, consejos de administración y equipos directivos en el Reino Unido verdaderamente reflejan los entornos laborales que manejan, y las medidas que tomamos hoy ayudarán a las empresas a identificar las iniciativas necesarias para crear una fuerza laboral más justa y diversa", afirmó la jefa del Gobierno.
May también presentó el Estatuto de la raza en el trabajo, que ya ha sido suscrito por el NHS y empresas como KPMG o Saatchi & Saatchi y que compromete a los firmantes a impulsar la contratación y progresión laboral de los empleados de minorías étnicas.
El director de políticas de la patronal empresarial CBI, Matthew Fell, dijo que "la transparencia puede ser un motor para la acción a la hora de abordar la brecha salarial étnica", igual que ya sucedió con la brecha de género.
El pasado abril entró en vigor el requisito gubernamental que obliga a las compañías de más de 250 trabajadores a informar sobre la brecha salarial entre hombres y mujeres, lo que incitó un debate nacional al revelarse enormes diferencias en todos los sectores.