Wilstermann perderá puntos por el mamarracho de Mosquera
Un grosero error del cuerpo técnico de Wilster permitirá que Bolívar conquiste los puntos en mesa y se aleje en la cima. Los Rojos jugaron con cinco extranjeros en cancha.
Opinión
Un burdo error del técnico de Wilstermann, Roberto Mosquera, echó por la borda el empate que conquistó ayer el Rojo frente a Bolívar (2-2), en el estadio Municipal de Sacaba.
El estratega Aviador envió al gramado al quinto jugador extranjero, violando la norma del torneo, al momento de ingresar al brasileño Carlinhos por el boliviano Jorge Ortiz, en el minuto 75.
En cancha estaban jugando el arquero chileno Raúl Olivares, el defensa brasileño Alex Da Silva, el volante argentino Cristian Chávez y el mediocampista brasileño Serginho.
Al momento de ingresar Carlinhos se infringió la norma y de forma inmediata el delegado de Bolívar, José María Antezana, realizó la observación en la planilla en la mesa de control, haciendo referencia a que Wilster puso en el terreno de juego a cinco foráneos.
Tras la variante, el público reaccionó de forma inmediata y comenzó a gritar en contra de la grotesca equivocación y también vociferó la salida del DT.
Apuntando con el dedo, los hinchas contaron a los jugadores extranjeros en cancha y no podían creer lo que había sucedido, pues los puntos eran de Bolívar ganara o no el encuentro.
Los aficionados molestos comenzaron a abandonar las graderías del escenario, manifestando “se perdió la posibilidad de luchar por el título del certamen”.
Tuvieron que pasar cerca de seis minutos para que el estratega del Aviador se diera cuenta y tratara de enmendar su error. Permitió el ingreso de Ezequiel Padilla y sacó a Chávez, quien recién se había enterado en las casamatas de lo acontecido con los cambios.
“Me di cuenta de lo que sucedió cuando salí. Como metimos cinco extranjeros es una derrota directa”, dijo el futbolista, al finalizar el encuentro.
El público estuvo furioso e insultó al entrenador cuando este se retiró a los vestuarios. “Fuera Mosquera, fuera Mosquera”, fueron los gritos de los hinchas que se sintieron decepcionados por lo que sucedió con los cambios.
Un burdo error del técnico de Wilstermann, Roberto Mosquera, echó por la borda el empate que conquistó ayer el Rojo frente a Bolívar (2-2), en el estadio Municipal de Sacaba.
El estratega Aviador envió al gramado al quinto jugador extranjero, violando la norma del torneo, al momento de ingresar al brasileño Carlinhos por el boliviano Jorge Ortiz, en el minuto 75.
En cancha estaban jugando el arquero chileno Raúl Olivares, el defensa brasileño Alex Da Silva, el volante argentino Cristian Chávez y el mediocampista brasileño Serginho.
Al momento de ingresar Carlinhos se infringió la norma y de forma inmediata el delegado de Bolívar, José María Antezana, realizó la observación en la planilla en la mesa de control, haciendo referencia a que Wilster puso en el terreno de juego a cinco foráneos.
Tras la variante, el público reaccionó de forma inmediata y comenzó a gritar en contra de la grotesca equivocación y también vociferó la salida del DT.
Apuntando con el dedo, los hinchas contaron a los jugadores extranjeros en cancha y no podían creer lo que había sucedido, pues los puntos eran de Bolívar ganara o no el encuentro.
Los aficionados molestos comenzaron a abandonar las graderías del escenario, manifestando “se perdió la posibilidad de luchar por el título del certamen”.
Tuvieron que pasar cerca de seis minutos para que el estratega del Aviador se diera cuenta y tratara de enmendar su error. Permitió el ingreso de Ezequiel Padilla y sacó a Chávez, quien recién se había enterado en las casamatas de lo acontecido con los cambios.
“Me di cuenta de lo que sucedió cuando salí. Como metimos cinco extranjeros es una derrota directa”, dijo el futbolista, al finalizar el encuentro.
El público estuvo furioso e insultó al entrenador cuando este se retiró a los vestuarios. “Fuera Mosquera, fuera Mosquera”, fueron los gritos de los hinchas que se sintieron decepcionados por lo que sucedió con los cambios.
