Irán advierte de que la amenaza de sanciones pone en peligro las conversaciones
Dubai, EP
El Gobierno de Irán ha advertido de que los países occidentales que le presionan con la imposición de sanciones mientras participan en las conversaciones nucleares pueden poner en peligro las posibilidades de llegar a un acuerdo sobre su programa atómico.
"Este enfoque de la presión en simultáneo con las negociaciones no va a funcionar. Estos países no deben entrar en negociaciones con este tipo de ilusiones y errores de interpretación", ha dicho en rueda de prensa el portavoz del Ministerio de Exteriores, Ramin Mehmanparast. "Ellos tienen sus propias concepciones equivocadas y esto les impide llegar a un acuerdo rápido y constructivo", ha señalado.
Asimismo, Mehmanparast ha ratificado la necesidad de que se reconozca y preserve el derecho de Irán de desarrollar energía nuclear con fines pacíficos. El portavoz ha añadido que su país aspira a tener unas conversaciones constructivas en Moscú, cuando se vuelve a reunir con el Grupo 5+1 (Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Rusia, China y Alemania) y ha destacado que ambas partes necesitan acercar sus puntos de vista para cooperar en todos los temas.
Los países occidentales han reforzado las sanciones contra Irán por su programa nuclear, que, según Washington y sus aliados, encubre el desarrollo de armas nucleares. Teherán asegura que sólo está interesado en el uso de la energía nuclear para generar electricidad y otros proyectos pacíficos.
Una nueva legislación estadounidense contra la industria petrolera de Irán entra en vigor el 28 de junio, días después de la próxima reunión entre Irán y el Grupo 5+1. Asimismo, Estados de la Unión Europea van a imponer en julio una prohibición total de las compras de crudo iraní. Los diplomáticos europeos afirman que esta táctica no va a cambiar hasta que Teherán toma medidas concretas para frenar su actividad nuclear.
En las últimas conversaciones entre Irán y las potencias mundiales, celebradas en Bagdad la semana pasada, Teherán presionó por el levantamiento de las sanciones sobre su petróleo y el sector bancario como una señal de buena voluntad. Sin embargo, horas después de que concluyeran las conversaciones, la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, dijo que no alterarían el doble enfoque de sanciones y negociaciones, y sostuvo que "todavía queda mucho trabajo por hacer".
El Gobierno de Irán ha advertido de que los países occidentales que le presionan con la imposición de sanciones mientras participan en las conversaciones nucleares pueden poner en peligro las posibilidades de llegar a un acuerdo sobre su programa atómico.
"Este enfoque de la presión en simultáneo con las negociaciones no va a funcionar. Estos países no deben entrar en negociaciones con este tipo de ilusiones y errores de interpretación", ha dicho en rueda de prensa el portavoz del Ministerio de Exteriores, Ramin Mehmanparast. "Ellos tienen sus propias concepciones equivocadas y esto les impide llegar a un acuerdo rápido y constructivo", ha señalado.
Asimismo, Mehmanparast ha ratificado la necesidad de que se reconozca y preserve el derecho de Irán de desarrollar energía nuclear con fines pacíficos. El portavoz ha añadido que su país aspira a tener unas conversaciones constructivas en Moscú, cuando se vuelve a reunir con el Grupo 5+1 (Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Rusia, China y Alemania) y ha destacado que ambas partes necesitan acercar sus puntos de vista para cooperar en todos los temas.
Los países occidentales han reforzado las sanciones contra Irán por su programa nuclear, que, según Washington y sus aliados, encubre el desarrollo de armas nucleares. Teherán asegura que sólo está interesado en el uso de la energía nuclear para generar electricidad y otros proyectos pacíficos.
Una nueva legislación estadounidense contra la industria petrolera de Irán entra en vigor el 28 de junio, días después de la próxima reunión entre Irán y el Grupo 5+1. Asimismo, Estados de la Unión Europea van a imponer en julio una prohibición total de las compras de crudo iraní. Los diplomáticos europeos afirman que esta táctica no va a cambiar hasta que Teherán toma medidas concretas para frenar su actividad nuclear.
En las últimas conversaciones entre Irán y las potencias mundiales, celebradas en Bagdad la semana pasada, Teherán presionó por el levantamiento de las sanciones sobre su petróleo y el sector bancario como una señal de buena voluntad. Sin embargo, horas después de que concluyeran las conversaciones, la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, dijo que no alterarían el doble enfoque de sanciones y negociaciones, y sostuvo que "todavía queda mucho trabajo por hacer".