Ratifican que líderes de CIDOB buscan socavar relación Gobierno-indígenas con fines políticos
La Paz, Abi
El director de la Agencia para el Desarrollo de las Macrorregiones (ADEMAF), Juan Ramón Quintana, ratificó el domingo que los líderes de la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente (CIDOB) que lideraron la marcha contra la construcción del tramo II de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos buscan socavar la relación entre el Gobierno y los indígenas de las tierras bajas con fines políticos.
En una entrevista con los medios estatales, Quintana sostuvo que la bandera de defensa del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) enarbolada por los dirigentes Adolfo Chávez, Fernando Vargas y Rafael Quispe fue utilizada como "estrategia política" para "herir" la relación del Gobierno con los pueblos indígenas.
"Hay un interés político de socavar la relación indígenas y Gobierno a través de la estrategia de conservación de los bosques que es una idea de los países capitalistas, en los que les pagan a los dueños de los territorios para que se pueda seguir haciendo daño a la naturaleza", argumentó.
En esa línea, Quintana recordó la denuncia contra Adolfo Chávez sobre un supuesto financiamiento de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) para implementar la "estrategia de preservar los bosques a cambio de plata".
"Esa denuncia tiene que ver con el envilecimiento de algunos dirigentes que prefieren sucumbir a una chequera en blanco", fundamentó.
Además, dijo que entre la estrategia política para "debilitar" al Gobierno también está la versión de Rafael Quispe, quien puso en debate la participación venezolana en la violenta intervención policial a la marcha indígena en la localidad de Yucumo.
El Director de ADEMAF afirmó que todas esas acciones develan que los dirigentes del CIDOB tienen "apetito" por ocupar espacios de poder en el Gobierno.
"En el caso de Chávez, desde hace tres años se olía esta adicción a tener un protagonismo político, era más fácil decirle a la CIDOB quiero ser candidato, pero no debería utilizar el financiamiento gringo para hacer campaña", complementó.
Quintana informó que ese plan se evidenció cuando varias personas que participaron en la marcha indígena, revelaron que los dirigentes tenían la intención de tomar el Gobierno y que inclusive se distribuyeron los 20 ministerios del Ejecutivo.
"Estos dirigentes quieren ser presidenciables de la noche a la mañana, pero que lo sean sin usar los recursos extranjeros y sin la inteligencia gringa para tumbar un gobierno", reprochó.
El director de la Agencia para el Desarrollo de las Macrorregiones (ADEMAF), Juan Ramón Quintana, ratificó el domingo que los líderes de la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente (CIDOB) que lideraron la marcha contra la construcción del tramo II de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos buscan socavar la relación entre el Gobierno y los indígenas de las tierras bajas con fines políticos.
En una entrevista con los medios estatales, Quintana sostuvo que la bandera de defensa del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) enarbolada por los dirigentes Adolfo Chávez, Fernando Vargas y Rafael Quispe fue utilizada como "estrategia política" para "herir" la relación del Gobierno con los pueblos indígenas.
"Hay un interés político de socavar la relación indígenas y Gobierno a través de la estrategia de conservación de los bosques que es una idea de los países capitalistas, en los que les pagan a los dueños de los territorios para que se pueda seguir haciendo daño a la naturaleza", argumentó.
En esa línea, Quintana recordó la denuncia contra Adolfo Chávez sobre un supuesto financiamiento de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) para implementar la "estrategia de preservar los bosques a cambio de plata".
"Esa denuncia tiene que ver con el envilecimiento de algunos dirigentes que prefieren sucumbir a una chequera en blanco", fundamentó.
Además, dijo que entre la estrategia política para "debilitar" al Gobierno también está la versión de Rafael Quispe, quien puso en debate la participación venezolana en la violenta intervención policial a la marcha indígena en la localidad de Yucumo.
El Director de ADEMAF afirmó que todas esas acciones develan que los dirigentes del CIDOB tienen "apetito" por ocupar espacios de poder en el Gobierno.
"En el caso de Chávez, desde hace tres años se olía esta adicción a tener un protagonismo político, era más fácil decirle a la CIDOB quiero ser candidato, pero no debería utilizar el financiamiento gringo para hacer campaña", complementó.
Quintana informó que ese plan se evidenció cuando varias personas que participaron en la marcha indígena, revelaron que los dirigentes tenían la intención de tomar el Gobierno y que inclusive se distribuyeron los 20 ministerios del Ejecutivo.
"Estos dirigentes quieren ser presidenciables de la noche a la mañana, pero que lo sean sin usar los recursos extranjeros y sin la inteligencia gringa para tumbar un gobierno", reprochó.