Brasil ofrece a Unasur sus redes para un "anillo óptico" regional
Asunción, EFE
Brasil, que linda con nueve países de Suramérica, planteó hoy en Asunción aprovechar su infraestructura y redes de comunicación para el "anillo óptico" regional que proyectan los doce países de la Unión Suramericana de Naciones (Unasur).
Esa idea fue presentada por el director del departamento de Banda Ancha del Ministerio brasileño de Comunicación, Artur Coimbra, en la I Reunión del Consejo Suramericano de Infraestructura y Planeamiento (Cosiplan).
Coimbra dijo que el objetivo del proyecto, aprobado el 30 de noviembre de 2011 por los ministros del área de infraestructura y comunicaciones de la Unasur, es reducir costes entre países de la región, así como del tráfico intercontinental a través de cables submarinos.
Añadió que las empresas estatales de telecomunicaciones de cada país en las áreas de frontera con Brasil son "parte prioritaria en el proyecto", aunque afirmó que el sector privado será bienvenido para lograr estar "completos".
"Sin la empresa privada el proyecto funciona, (pero) lo ideal es que los Estados sin empresas estatales indiquen qué empresas privadas se manifiestan" (interesadas), refirió, al detallar que en las áreas de frontera las comunicaciones están interconectadas.
Por su parte, el director de tecnología e innovación de Telebras, Paulo Kapp, planteó la integración a través de lo que se conoce como 'peering' (interconexión voluntaria de empresas autónomas) "sin limitación de bandas para que el sistema funcione".
Telebras, que posee redes en áreas de frontera que pueden ser activadas en corto plazo, también tiene disponibles cables submarinos de fibra óptica con EE.UU., con un tramo al que se enganchan Colombia, Europa y África.
La reunión de Cosiplan, en la que los delegados deberán exponer las condiciones de cada uno de los países en cuanto a redes de fibra óptica, fue abierta por el ministro de Obras Públicas de Paraguay, Cecilio Pérez, cuyo país preside actualmente la Unasur.
En la apertura también participó la secretaria general de la Unasur, la colombiana María Emma Mejía, quien advirtió de que la región tiene "un serio rezago" tecnológico vinculado con la falta de infraestructura.
Brasil, que linda con nueve países de Suramérica, planteó hoy en Asunción aprovechar su infraestructura y redes de comunicación para el "anillo óptico" regional que proyectan los doce países de la Unión Suramericana de Naciones (Unasur).
Esa idea fue presentada por el director del departamento de Banda Ancha del Ministerio brasileño de Comunicación, Artur Coimbra, en la I Reunión del Consejo Suramericano de Infraestructura y Planeamiento (Cosiplan).
Coimbra dijo que el objetivo del proyecto, aprobado el 30 de noviembre de 2011 por los ministros del área de infraestructura y comunicaciones de la Unasur, es reducir costes entre países de la región, así como del tráfico intercontinental a través de cables submarinos.
Añadió que las empresas estatales de telecomunicaciones de cada país en las áreas de frontera con Brasil son "parte prioritaria en el proyecto", aunque afirmó que el sector privado será bienvenido para lograr estar "completos".
"Sin la empresa privada el proyecto funciona, (pero) lo ideal es que los Estados sin empresas estatales indiquen qué empresas privadas se manifiestan" (interesadas), refirió, al detallar que en las áreas de frontera las comunicaciones están interconectadas.
Por su parte, el director de tecnología e innovación de Telebras, Paulo Kapp, planteó la integración a través de lo que se conoce como 'peering' (interconexión voluntaria de empresas autónomas) "sin limitación de bandas para que el sistema funcione".
Telebras, que posee redes en áreas de frontera que pueden ser activadas en corto plazo, también tiene disponibles cables submarinos de fibra óptica con EE.UU., con un tramo al que se enganchan Colombia, Europa y África.
La reunión de Cosiplan, en la que los delegados deberán exponer las condiciones de cada uno de los países en cuanto a redes de fibra óptica, fue abierta por el ministro de Obras Públicas de Paraguay, Cecilio Pérez, cuyo país preside actualmente la Unasur.
En la apertura también participó la secretaria general de la Unasur, la colombiana María Emma Mejía, quien advirtió de que la región tiene "un serio rezago" tecnológico vinculado con la falta de infraestructura.