Lewandowski pone su futuro en manos de Flick

A sus 37 años, el polaco que acaba contrato con el Barcelona esta temporada, espera una charla con su entrenador para decidir su futuro. No le faltan ofertas.

Santi Giménez

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El futuro de Robert Lewandowski sigue abierto, aunque el delantero polaco de 37 años pide tiempo para tomar una decisión. Ofertas para seguir en activo no le faltan, pues ya trascendió la de los Chicago Fire de la MLS y sus agentes han mantenido reuniones con la Liga de Arabia Saudí. Incluso en el Barcelona, nadie da por acabada la relación entre el club y su goleador a final de temporada. El delantero habló en un programa de Youtube en Polonia y desvinculó la decisión que vaya a tomar del aspecto económico. En ese campo, el Barça jamás podría competir con las ofertas que le puedan llegar.

Lewandowski lo pospone todo a una charla con su entrenador. El delantero, por decirlo claro se pone en manos de Flick, al que le une una magnífica relación más allá de la deportiva.

En declaraciones en YouTube a Bogdan Rymanowski, el mismo periodista que ha escrito una biografías del internacional, Lewandowski afirmó respecto a sus planes de cara a la próxima temporada que “tengo tiempo para tomar una decisión. Ahora mismo no sé dónde quiero jugar. No sé qué camino tomar, pero no tengo presión. No hay necesidad de pensarlo todavía. Mucho depende del plan del club y de lo que yo quiera. No se trata de reducir mi salario a la mitad”. Añadió que “de momento no he hablado con el entrenador de las ofertas ni clubes interesados”. De los planes que tenga Flick con él de cara a un futuro dependerá mucho la decisión del goleador, que acaba contrato con el Barça este 30de junio.

Preguntado por si, tal y como aparece en su biografía, el Barça le pidió que no marcara más goles para no tener que abonar una cantidad extra al Bayern, Lewandowski dio una explicación propia de un veterano y de un jugador comprometido con el club.

“Era un bonus. En ese momento el club miraba cada euro, no era un tema pequeño respeto mucho al club y a la gente que trabaja ahí y hay cosas de las que no me gusta hablar. Era consciente de la situación del club y una prima no era poca cosa. Me pregunté si tenía que marcar o no”