UNICEF alertó que el avance del huracán Melissa pone en riesgo a 1,6 millones de niños en todo el Caribe

El ciclón ya ha dejado víctimas fatales y desplazamientos, y amenaza con provocar graves daños en Haití, Jamaica, Cuba y República Dominicana, donde la organización coordina acciones de emergencia para proteger a la infancia

El huracán Melissa avanza a baja velocidad —alrededor de seis kilómetros por hora— y las proyecciones del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos lo ubican rumbo a Jamaica, donde podría tocar tierra como un huracán mayor entre lunes y martes.

Los pronósticos advierten que las condiciones extremas continuarán, con lluvias intensas, inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra peligrosos en Jamaica, Cuba, Haití y la República Dominicana durante buena parte de la semana. Tras pasar por Jamaica y Cuba, se prevé que el ciclón avance hacia las Bahamas.

Niños jugando en una calle
Niños jugando en una calle inundada por las lluvias de la tormenta tropical Melissa en Santo Domingo, República Dominicana (AP Foto/Ricardo Hernandez)

La emergencia ya ha dejado víctimas. Haití reportó tres fallecidos, mientras que en la República Dominicana miles de personas han perdido el acceso al agua potable y varias comunidades han debido evacuar.

Las autoridades de Jamaica han advertido a la población sobre el peligro inminente y recalcan que la “furia” de Melissa podría sentirse en toda la isla. En respuesta, se han activado protocolos de evacuación y refugios en las zonas más expuestas.

Además de los riesgos inmediatos para la vida y la infraestructura, la vulnerabilidad de la infancia en estas situaciones es una preocupación central de las agencias humanitarias.

Benes subrayó que reforzar la preparación y la respuesta de emergencia es clave para minimizar el impacto de Melissa.

UNICEF ayuda a fortalecer las capacidades nacionales para anticipar y responder a las emergencias relacionadas con el clima y para brindar servicios esenciales a la infancia. Esto es fundamental para proteger a quienes más lo necesitan”, destacó.

Entre las acciones implementadas están el almacenamiento previo de suministros como kits de higiene, pastillas potabilizadoras, contenedores de agua, insumos médicos y la entrega de fondos a familias en riesgo, principalmente en el sur de Haití. Además, se han impulsado sistemas de alerta temprana y comunicación en coordinación con autoridades y diversas organizaciones locales.

El huracán Melissa avanza a
El huracán Melissa avanza a baja velocidad y las proyecciones del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos lo ubican rumbo a Jamaica (REUTERS/Octavio Jones)

Durante la última década, UNICEF estima que cada año unos 11 millones de personas —incluyendo casi 4 millones de niños, niñas y adolescentes— se ven afectados por desastres naturales y emergencias climáticas en América Latina y el Caribe. Para 2025, la agencia solicitó 19 millones de dólares para reforzar la preparación y la capacidad de respuesta, con el objetivo de contener el impacto de ciclones, huracanes y crisis similares sobre los más vulnerables.

La temporada de huracanes del Atlántico de este año ya contabiliza trece ciclones, con Melissa sumándose a tormentas como Erin, Gabrielle, Humberto e Imelda. Hasta el momento, solo Chantal impactó territorio estadounidense, dejando dos víctimas mortales en Carolina del Norte.

La situación impulsa una vez más el llamado a una respuesta internacional coordinada. Melissa se suma a una serie de fenómenos recientes que subrayan la urgencia de invertir en resiliencia y planificación, especialmente en niños y en familias que viven en áreas de alta exposición, sean costeras o rurales.

UNICEF insiste en que el acceso seguro a agua, saneamiento y refugio debe garantizarse como prioridad absoluta en la asistencia.

UNICEF insiste en que el
UNICEF insiste en que el acceso seguro a agua, saneamiento y refugio debe garantizarse como prioridad absoluta en la asistencia (REUTERS/Octavio Jones)

Mientras el ciclón mantiene en vilo a la región, la combinación de infraestructura frágil, recursos limitados y exposición al cambio climático multiplica el peligro para la infancia.

La experiencia reciente frente a desastres extremos demuestra que las comunidades mejor preparadas logran salvar más vidas y recuperarse más rápido tras el paso de la emergencia. Por eso, UNICEF urge a los gobiernos, aliados humanitarios y donantes globales a redoblar el apoyo y anticipar recursos para hacer frente a amenazas como Melissa y proteger el futuro de millones de niños caribeños.

Entradas populares