La polémica maniobra ‘NFL’ de Luis Enrique... es ilegal
Volvió a sentarse en la tribuna de prensa en vez de en el banquillo durante el primer tiempo. En España no se puede hacer; en Europa, la regla tampoco lo avala.
AsEs la imagen de la semana en Francia, también en el fútbol europeo. Luis Enrique, con un cabestrillo en el brazo izquierdo, recuperándose de la operación de la fractura de la clavícula que sufrió montando en bicicleta, sentado en la tribuna de prensa, en vez de en el banquillo, con unos cascos enormes y analizando el partido con un ordenador sobre la mesa. El asturiano repitió contra el Atalanta lo aplicado el pasado domingo contra el Lens con un rotundo éxito, ya que el Paris Saint-Germain vapuleó a los italianos y en la primera parte fue un rodillo que pudo irse al descanso con una goleada de escándalo.
El técnico asturiano no descarta repetir el invento, ya utilizado en el rugby, sobre todo en el seis naciones por los seleccionadores, también en la NFL, con los asistentes repartidos por la zona de prensa para analizar con lupa cada movimiento, en los próximos encuentros. “Repito lo que hice en el último partido porque, desde arriba, recopilo mucha información que puedo utilizar en el descanso", confió a los micrófonos de Canal + Francia.
FRANCK FIFE
Será, en todo caso, en el Parque de los Príncipes, ya que fuera de casa, al haber menos seguridad y en un estadio hostil, Lucho aseguró que “no lo haré porque mi integridad física no es buena”. La tribuna de prensa se convirtió, este miércoles, como ya ocurriera el pasado domingo, en el principal tema de conversación de la prensa durante el primer tiempo contra la Atalanta. Todos los periodistas, unánimemente, intentaron fotografiar al entrenador español, sorprendidos de una ocurrencia que no es es común en el fútbol francés, tampoco en el fútbol europeo.
La reglamentación, en contra
De hecho, en España esta práctica está prohibida y no podría realizarse por ningún entrenador. El artículo 173 del Reglamento de la Real Federación Española de Fútbol estipula que “salvo fuerza mayor, el/la entrenador/a titular deberá estar presente en los entrenamientos y en los partidos que su equipo dispute en cualquier competición, figurando como tal en el acta correspondiente y ocupando su puesto en el banquillo durante el partido”.
En competiciones UEFA, la norma es diferente, y da más espacio a la interpretación sin tipificar como falta el no estar en el banquillo durante una de las dos partes de un partido, aunque el reglamento del máximo organismo europeo da una descripción detallada en su Reglamento. “Los 15 oficiales del equipo y los 12 jugadores suplentes indicados en la hoja de partido, es decir, un total de 27 personas, pueden sentarse en el banquillo del equipo. Si el banquillo tiene menos de 27 asientos, el número restante de asientos debe acomodarse a un lado de cada banquillo (o detrás, si los banquillos están en las gradas), con acceso a los vestuarios. Deben estar separados del público general y, preferiblemente, cubiertos. La disposición debe ser la misma para ambos equipos. Todos los suplentes y el médico del equipo indicados en la hoja de partido deben estar sentados en el banquillo durante el partido”.
Luis Enrique puede controlarlo ‘todo’ desde la tribuna de prensa. Con sus cascos, se comunicó permanentemente con su ayudante Rafel Pol, que ejerció de entrenador en el terreno de juego durante la primera parte. Sentado al lado de los analistas tácticos, el gijonés pudo comentar sus impresiones del equipo sin tener que esperar al descanso y después, en los vestuarios, su charla técnica fue más enriquecedora al disponer de toda la información que no le proporciona el hecho de estar a pie de campo sin un ángulo con el que poder diseccionar todos los ajustes tácticos.
La polémica maniobra ‘NFL’ de Luis Enrique... es ilegal
Lo que dice el reglamento de la RFEF.
“Es muy diferente ver el partido sentado. Mi charla en el descanso contra el Lens fue totalmente diferente porque estaba arriba: vi cosas que mejorar, algunos errores... Hace mucho tiempo que creo que podemos aportar algo más a nuestro funcionamiento, y siempre estoy abierto a cualquier cosa que pueda mejorar nuestro rendimiento”, había confesado en las horas previas al encuentro.
Luis Enrique tiene la intención de seguir enriqueciendo el trabajo de entrenador, después de haber sido pionero durante su etapa en el Celta al colocar un andamio en los entrenamientos para poder analizar todos los ejercicios desde una posición privilegiada. Dicho método fue copiado por muchos entrenadores, como por ejemplo Nagelsmann, considerado durante muchos años como un revolucionario en los banquillos. Una innovación que ha llegado para quedarse en el Paris Saint-Germain.