Adiós a los pesticidas: el truco para que tu fruta quede completamente limpia

La utilización de bicarbonato o vinagre diluido en agua es uno de los mejores métodos más infalible para desinfectar las frutas y verduras.

Arianna Villa
As
Un estudio elaborado por el investigador Víctor Martín Cerdeño, de la Universidad Complutense de Madrid, en 2017, los hogares de España consumieron en torno a 4.370 millones de kilos de frutas frescas y gastaron 6.195 millones de euros en este tipo de productos. El consumo de este tipo de alimentos aporta importantes beneficios para la salud como vitaminas y minerales, ayudando a fortalecer el sistema inmunológico.

Sin embargo, el consumo de frutas y verduras no es tan positivo del todo, ya que en muchos casos conllevan gran cantidad de pesticidas. Este tipo de alimentos en la Unión Europea con restos de perfluoroalquiladas (PFAS) se han triplicado en los últimos diez años, según un estudio publicado por la Red de Acción de Pesticidas (PAN Europe), que reclama una menor utilización de los llamados ‘químicos eternos’, que son extraordinariamente persistentes a los fenómenos meteorológicos.

Por ello, resulta indispensable saber lavar correctamente las frutas, con el fin de, además de evitar ingerir estos pesticidas, acabar también con otros elementos como bacterias o suciedad. La dietista Melanie Marcus ha recomendado a través de la revista ELLE la forma en la que lavarlos: con agua fría y frotando suavemente, sin necesidad de jabones o detergentes especiales.

Lavar la fruta justo antes de consumirla

En los casos en los que se quiera lavar con mayor profundidad la fruta, lo mejor es hacerlo remojándola en una solución de una cucharada de bicarbonato de sodio y dos tazas de agua, durante unos 15 minutos, y posteriormente aclararlos con abundante agua. Otra de las opciones, es hacerlo con vinagre: mezclando una parte de vinagre con tres de agua y dejando la fruta a remojo durante 10 o 15 minutos. En ambos casos además de eliminar algunas bacterias, también se puede acabar con los pesticidas.

La experta incide en que este lavado ha de hacerse justo antes de que se vaya a comer, pues esto hace que se conserven por más tiempo. En el caso de lavarlas después de la compra, hay que secarlas muy bien antes de guardarlos. En sus envases originales, pueden durar hasta dos semanas sin que se estropeen.

En los casos en los que se opte por introducir la fruta en un recipiente, es importante que este tenga algún tipo de ventilación. El cajón de verdura tiene la humedad y temperatura idóneas para mantener este tipo de productos frescos.

Entradas populares