Fórmula 1: Red Bull acusó a McLaren por una supuesta trampa y se calienta la pelea por el título
La escudería que tiene a Max Verstappen como figura elevó una denuncia por la presunta utilización de agua en los neumáticos. Esto genera un mejor rendimiento en largas distancias
Vale destacar que esto no está permitido bajo ningún concepto, porque los mecánicos de Pirelli son los encargados de montar y desmontar los neumáticos en las llantas, las cuales son reportadas por los equipos para la entrega de los neumáticos al azar. Una vez colocados, nadie puede manipularlos. Los equipos tampoco tienen herramientas para extraerlos y volverlos a colocar ni tampoco pueden ser reutilizados.
Dicho esto, surge una pregunta obligatoria: ¿Cómo puede llegar el agua a los neumáticos y desaparecer después de la carrera sin que Pirelli se dé cuenta? La principal sospecha surge de que se podría introducir el agua a través de una válvula. Sin embargo, inyectar líquidos sin ser detectado es extremadamente difícil por la gran cantidad de ingenieros de la multinacional italiana en el circuito.
Sin embargo, las dudas surgirían con facilidad si el agua no se evaporara antes del desmontado de los neumáticos en las tres a cuatro horas posteriores a la carrera. La publicación germana citó que Red Bull “experimentó con agua en los neumáticos” hace muchos años, pero en ese entonces “el truco no estaba explícitamente prohibido”. A partir de ese momento, la FIA cerró este vacío legal. Desde el campamento del actual campeón sugieren que ex empleados de la escudería “han desempolvado y refinado este truco” en sus nuevos trabajos. “Se dice que varios equipos se benefician de esta práctica en carreras largas, incluido McLaren”, informó Auto Motor und Sport.
La Federación Internacional del Automóvil (FIA) ya está investigando las acusaciones y, junto con Pirelli, evitaron pronunciarse públicamente sobre el caso, aunque extraoficialmente estiman que esta historia es solo “otra tormenta en un vaso de agua”. Además, el portal advirtió que no se observaron situaciones sospechosas en Austin y México con el agregado de que Pirelli debería haber reportado la menor irregularidad a los comisarios técnicos de la FIA.
Este contrapunto se enmarca en una guerra fría entre ambas escuderías. En septiembre pasado, el team liderado en la dirección por Christian Horner acusó a McLaren y Mercedes por supuestas irregularidades en los alerones delanteros móviles que habrían facilitado una mejora aerodinámica. Sin embargo, la FIA confirmó que “todos los alerones delanteros cumplen actualmente con la normativa 2024″ tras “numerosas comprobaciones”.
Un mes más tarde, en octubre, el impacto siguió en la Máxima después de que Red Bull haya sido denunciado por la existencia de un dispositivo ilegal que se creía podría usarse para ajustar la altura de la parte delantera del piso del coche. La preocupación de las otras escuderías era que esto pudiera usarse para realizar cambios en la configuración del coche entre la clasificación y las carreras, cuando no están permitidos.
Un portavoz del denunciante reconoció esta situación a la BBC Sport: “Sí, (el dispositivo) existe, aunque es inaccesible una vez que el coche está completamente ensamblado y listo para funcionar”. “En la numerosa correspondencia que hemos mantenido con la FIA se ha mencionado este tema y hemos acordado un plan para seguir adelante”, agregó.
A falta de las carreras de Interlagos, Las Vegas, Qatar (habrá sprint) y Abu Dhabi, McLaren domina el campeonato de constructores con 544 puntos y posee a Lando Norris en la segunda posición entre los pilotos con 323 unidades. Max Verstappen lo mira desde la cima (367), mientras que Red Bull como equipo se desplomó de la primera a la tercera colocación (481). Entre medio, Ferrari pide pista con 509 puntos.