Crisis política en Alemania: aumenta la presión sobre Olaf Scholz para que convoque elecciones anticipadas
Los Verdes se unieron a la oposición conservadora y al FDP para exigir al canciller alemán que adelante el proceso electoral y resuelva la parálisis legislativa que amenaza el presupuesto de 2025
No obstante, su socio de coalición, los Verdes, se unió a su antiguo aliado, el neoliberal Partido Demócrata Liberal (FPD), y a la oposición conservadora para exigir a Scholz que actúe con mayor celeridad.
“Esperamos que aclare las cosas esta semana”, dijo en rueda de prensa Ricarda Lang, copresidenta de Los Verdes, quien añadió que el tiempo parlamentario que queda antes de los comicios debería dedicarse a tareas urgentes en lugar de continuar con la agenda legislativa de la antigua coalición.
La coalición de Scholz perdió su mayoría parlamentaria el miércoles, cuando el FDP abandonó el gobierno por el deseo de sus socios más izquierdistas de gastar más, recurriendo al endeudamiento público si fuera necesario.
Los legisladores anularon el lunes una reunión crucial de planificación presupuestaria, en una señal de que las posibilidades de aprobar un presupuesto se están desvaneciendo, incluso en un momento en que crecen las peticiones de intervención gubernamental para evitar una crisis en la mayor economía de Europa.
La supresión de la reunión de la comisión hace menos probable que se pueda reunir una mayoría en el Bundestag para aprobar un presupuesto, incluso si los socialdemócratas y los Verdes consiguen proponer uno.
Los conservadores, que marchan cómodamente por delante en los sondeos, dicen que Scholz está retrasando las elecciones con la esperanza de conseguir algunas victorias políticas en las próximas semanas.
Por su parte, Scholz afirmó el domingo que puede imaginarse un voto de confianza en diciembre, después de que anteriormente planteara como fecha para esa votación enero del año próximo, lo que hubiera reportado la convocatoria de elecciones a marzo de 2025.
“En plantear el voto de confianza antes de Navidad, cuando todos lo ven así, no veo ningún problema”, dijo el canciller al aludir a los grupos parlamentarios de la Cámara Baja o Bundestag, en una entrevista con la televisión pública ‘ARD’.
Hasta en dos ocasiones afirmó el jefe del Gobierno germano que si los grupos del Parlamento, en especial el de su formación, el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), y la mayor agrupación de la oposición, compuesta por la Unión Cristianodemócrata (CDU) y la Unión Socialcristiano de Baviera (CSU) llegan a un acuerdo, el voto de confianza podría producirse en diciembre.
“Yo también quiero que las cosas vayan rápido, quiero un nuevo mandato, y que éste no venga de otros que no sean los ciudadanos”, señaló Scholz, que intervenía en una larga entrevista de una hora después de que el miércoles él decidiera prescindir de su ministro de Finanzas, el liberal Christian Lindner, lo que precipitó la actual situación de incertidumbre política de Alemania.
La expulsión de Lindner supuso el fin del tripartito —compuesto hasta el miércoles por el SPD, Los Verdes y los liberales del FDP— que en los últimos tres años había formado el Gobierno dirigido por Scholz.