Un Rayo para ver el armario

Simeone mide esta noche en Vallecas la profundidad de su plantel. El equipo de Iñigo Pérez le aguarda con James y cambios también.

Patricia Cazón

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Simeone no ha dado pista alguna esta vez. El once que salte en Vallecas será una incógnita. Solo una cosa parece segura: el Rayo de James será el instrumento para medir su armario. Porque los 185 millones gastados este verano por el club rojiblanco han sido en parte para eso: llenarlo de prendas de garantías, no parches (Söyüncüs, Paulistas), jugadores que eran tiros al aire hacia ningún lugar. Hace una temporada, como Simeone no podía rotar, se veía obligado a afrontar cada partido con siete bajas entre los parones de septiembre y octubre y siempre los mismos. Quizá lo que después ocurrió en marzo, la nada, otro año sin visita a Neptuno, tenga sus raíces aquí. Esta temporada es distinto y Vallecas será el algodón.

Simeone debe hacer cambios, rotaciones, para que su plantel pase la primera maratón sin secuelas en la enfermería. El argentino lo llamó oportunidad, el tiempo para que los que quieren jugar lo demuestren. Entre este domingo y el jueves debe confeccionar sus once con Excel para repartir esfuerzos, dosificar. El siguiente domingo es el Madrid en el Metropolitano, después el Benfica en la Champions y el cierre a estas tres primeras semanas de etapas de alta montaña en la temporada.

Las posibilidades del Cholo

Pero ayer, en el segundo y último entrenamiento del Atlético antes de Vallecas, trabajó de forma suave y dividió a sus jugadores, por un lado los que habían sido titulares en Champions, estirando, por otro, los demás, con balón. Sin petos de onces ni probaturas. Quizá De Paul no esté (ayer hizo “trabajo individualizado”, apartado del grupo), quizá Julián Alvarez siga buscando la chispa junto a Sorloth en la delantera. Vallecas tiembla solo de pensar en el gigante noruego: cada vez que se han encontrado, le ha hecho gol. Cinco partidos, seis tantos. También podría regresar al once Gallagher, en tan poco ya tan ídolo, un Nahuel que va a más o Giuliano, ese Simeone que cuando sale a los partidos siempre los llena de garra y de lucha. Inevitable, es su linaje. Y si no fuese hijo del entrenador quizá llevaría ya más minutos (20). Como el padre, es uno de esos futbolistas que cambian la temperatura de las cosas con rozarlas.

El Rayo repite en Vallecas, tras su espectacular remontada ante Osasuna. Una victoria-inyección-de-moral de cara al derbi ante el Atlético, que el año pasado le ganó 0-7 este partido. Iñigo Pérez también rotará. Unai López e Isi se pueden sumar a Camello en ataque. Y luego está James, claro. A punto de ser del Atleti, aquel 3-7 al Madrid una noche de verano en New Jersey lo canceló. Ahora ha fichado por el Rayo y, por lo que mostró en su debut el lunes, aún le queda mucho fútbol en las botas. Tendrá más minutos. Quizá podría ser titular.

Si Simeone ha ganado 82,3% de sus partidos en el Atleti frente al Rayo y ha salido de Vallecas con victoria en las últimas cinco visitas, el Rayo ha empatado sus últimos tres derbis madrileños en Liga y nunca han sido cuatro. A ver cómo le va al Cholo su fondo de armario.