Los Red Devils lamentan las oportunidades desperdiciadas mientras su ex estrella regresa para atormentarlos
Las decisiones precipitadas pueden costarte partidos o incluso el trabajo, especialmente en el Manchester United.
Erik ten Hag no habría tenido motivos para arrepentirse de haber decidido dejar fuera a Marcus Rashford en buena forma si su equipo hubiera aprovechado su dominio en la primera mitad.
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Y Rashford hizo poco en su media hora en el campo para sugerir que habría hecho una gran diferencia desde el principio.
Pero aún así resultaba extraño que Ten Hag hubiera hablado sobre la mejora del exdelantero de Inglaterra en su desempeño dentro y fuera del campo, solo para dejarlo afuera.
Y no se pudo evitar el hecho de que este empate sin goles fue un paso atrás para Rashord, su entrenador y el club al final de una semana por lo demás prometedora.
El United había marcado 10 goles sin respuesta al derrotar al Southampton en la Premier League y al Barnsley en la Copa de la Liga , con Rashford encontrando el gol tres veces en los dos partidos.
Sin embargo, después de amenazar con hacer lo mismo con Palace, posiblemente tuvieron suerte de escapar con un punto después de que sus anfitriones tuvieron dos grandes oportunidades en el segundo tiempo para registrar su tercera victoria consecutiva en la liga contra los hombres de Ten Hag.
Durante los primeros 45 minutos, el equipo de Oliver Glasner fue una sombra del equipo que había completado su primer doblete de liga sobre el United en más de 50 años cuando lo humilló 4-0 en Selhurst Park en mayo.
Sin embargo, Andre Onana tuvo que hacer una excelente doble parada para negarle el gol a Eddie Nketiah y al suplente Ismaila Sarr en la segunda mitad.
Pero el portero del United no debería haber tenido ninguna oportunidad cuando Sarr le pasó a Eberechi Eze , pero el internacional inglés disparó desviado.