Crece el conflicto por la “guerra civil” que inició el Manchester City contra la Premier League y pone en jaque a todo el fútbol inglés
A la espera del juicio de noviembre, los Ciudadanos suman voces a favor mientras se desarrolla el litigio con el certamen británico por las normas financieras
InfobaeLa avanzada que lanzó Manchester City contra la Premier League antes del esperado juicio que definirá si incumplió 115 reglas financieras –y podría enviarlo al descenso– atraviesa horas decisivas. Lo que los medios ingleses denominaron como la “guerra civil” en el fútbol de ese país está en pleno proceso: los Ciudadanos atacaron directamente al corazón de las reglamentaciones financieras alegando que las transacciones entre partes asociadas (APT) son “ilegales”. Aquella barrera que se endureció en 2021 para inspeccionar al detalle a los clubes tras la compra del Newcastle por parte de capitales árabes busca evitar que las entidades inflen los acuerdos comerciales con empresas vinculadas a sus propietarios. Eso, para el City, es una “discriminación”.
En las últimas horas se conoció la voz del propietario del Aston Villa, quien se pararía del lado de la postura de los Ciudadanos en el entuerto a pesar de que no aparecía en la previa como el principal adepto a acompañar la tajante cruzada del club de Manchester: “Las reglas no tienen sentido y no son buenas para el fútbol. Algunas de las reglas en realidad han resultado en consolidar el status quo más que en crear movilidad ascendente y fluidez en el deporte. Administrar un equipo deportivo se ha convertido más en algo así como ser un tesorero o un contador de granos en lugar de mirar lo que necesita. Se convierte en un juego financiero, no deportivo”, declaró el “hombre más rico de Egipto”, Nassef Sawiris, al diario Financial Times. La sociedad que este empresario tiene con el multimillonario estadounidense Wesley Edens adquirió definitivamente el paquete accionario de los Villanos en 2019 y en las últimas horas se deslizó que “compartía algunas de las preocupaciones del City”, según The Telegraph.
Lo que sorprende es que el Newcastle, por quien se endureció esta regla en 2021, todavía no haya tomado una posición clara para el lado del City cuando se creía que eso sería un hecho. “Se espera que el club de propiedad saudí adopte una postura neutral para evitar verse atrapado en el fuego cruzado de una disputa cada vez mayor”, indicó el periódico británico.
El cronista Ben Rumsby advirtió en el Telegraph que “durante mucho tiempo pareció más probable que Newcastle, en lugar del City, fuera el club que lanzara un desafío legal contra las reglas introducidas”, sin embargo por ahora eso no está sucediendo y el silencio podría ser su arma clave en esta cruzada: “Pero como las cuentas más recientes del Newcastle muestran que pudieron generar solo 43.9 millones de libras en ingresos comerciales en 2022-23 en comparación con los 341.4 millones del City, es posible que los verdaderos ganadores de esta guerra no terminen siendo quienes todos piensan”.
Si encuentran culpable al Manchester de los 115 cargos, no sólo pretenden que se aplique una sensible reducción de puntos sino que buscan ejecutar reglas “que permitan a la liga expulsar a un club de su membresía”, aunque no esperan que lo despojen de los títulos que obtuvo en los últimos años. “Están furiosos con el City por lanzar este reclamo contra la Premier League cuando en noviembre de 2021 el City aprobó inicialmente los cambios”.
Pero incluso hay otro foco de conflicto más que golpea sobre esto, porque “la disputa legal del Manchester City con la Premier League ha puesto en riesgo el acuerdo de financiación de 900 millones de libras para la EFL”, en referencia a las siglas del Championship, la segunda categoría inglesa. En The Times advierten que “fuentes de alto nivel” se están amparando en el reclamo de la entidad celeste de Manchester “como un factor en su fracaso para llegar a un acuerdo vital para el futuro financiero de los 72 clubes en las tres divisiones inferiores a la Premier League, a pesar de la presión del gobierno y un nuevo acuerdo de radiodifusión nacional de primer nivel por valor de 6.700 millones de libras”.
Y este no es un tema menor porque en el ascenso el “New Deal For Football” es una preocupación central ya que las entidades del Championship esperan una inyección de casi 200 millones de dólares adicionales por temporada durante seis años por parte de la Premier League. Leeds, Hull City, Stoke, West Brom, Swansea y Cardiff son los líderes de la iniciativa para “aliviar las restricciones al gasto en medio de la creciente ira por el fracaso de la Premier League a la hora de acordar un ‘New Deal’”, advierten en Telegraph. En esa sintonía, aseguran que muchos clubes de la segunda división pretenden eliminar los controles financieros actuales como “única opción para evitar una crisis futura”. Es decir, se pararían en la vereda del Manchester City durante esta “guerra civil” contra la Premier.
Mientras tanto, el esperado “New Deal” entre la Premier y la EFL sigue stand by. “La EFL ha dicho repetidamente que se necesita una redistribución financiera junto con mejores controles de costos para ayudar a lograr su objetivo primordial de hacer que los clubes de la EFL sean financieramente sostenibles y competitivos, para que puedan continuar sirviendo a sus seguidores y comunidades en el futuro, sin importar en qué nivel de la pirámide jueguen”, fue el comunicado que emitió ese organismo en marzo pasado.
En Inglaterra aseguran que “muchos clubes sienten que tienen que trabajar especialmente duro para recaudar ingresos adicionales, organizando conciertos de música y eventos deportivos alternativos durante la temporada de veda”, mientras plantean al mismo tiempo la dicotomía de cómo puede asfixiar a un club como el City que los acuerdos de patrocinio tengan un valor justo de mercado si acaba de conseguir el récord de alzar el cuarto título consecutivo en la Premier League.
Antes de conocerse este nuevo juicio, el líder del Manchester Khaldoon Al Mubarak había dado una entrevista a Sky donde se refirió a las 115 acusaciones que podrían enviar a su entidad al descenso aunque también anticipó su mirada sobre las normas financieras: “Espero que haya un poco más de sensibilidad en la regulación, (que haya) siempre un enfoque equilibrado. Está tardando más de lo que nadie esperaba, pero es lo que es. Seamos juzgados por los hechos, no por las reclamaciones y contrademandas”.
Una gran mayoría de periodistas que siguen de cerca este tema mantienen su preocupación sobre el impacto que tendrá este monstruoso doble litigio del club más poderoso del país en la actualidad. Pero también hay voces como la del columnista del Times Martin Samuel, quien baja el tono al conflicto: “Hay dos posibles resultados principales para el desafío del City a la liga por las Transacciones con Partes Asociadas (APT). El City pierde y la competición continúa como está. Las mismas regulaciones financieras, el status quo. Si ganan y el APT es anulado, el City tendrá más dinero para gastar a través de mayores patrocinios e inversiones de Abu Dhabi pero, como descubrió el Manchester United, eso tampoco siempre significa éxito. El United ha gastado muchísimo, pero no ha ganado la liga desde 2013, cuando Sir Alex Ferguson se fue, porque él era un genio del fútbol y el resto no lo era”. En ese punto, remarca que a pesar del constante flujo de dinero, quien termina haciendo la diferencia son los jugadores en la cancha y, en el caso de los Ciudadanos, la gestión del entrenador Josep Guardiola.
Samuel remarca que las regulaciones no son nuevas e incluso recuerda que desde hace más de una década ya corren límites financieros en la UEFA. “Puede que el City haya exagerado su victimismo, pero no la mitad de lo que la liga y sus clubes miembros exageraron el funcionamiento de la APT y las Reglas de Rentabilidad y Sostenibilidad”, aclara sobre cómo cada parte alimentó al conflicto que hoy mantiene en vilo al fútbol local.
En resumen, para el cronista lo que se modificó en el último tiempo fue “la carga de la prueba” porque “pasó de que la liga tuviera que demostrar que una parte relacionada había inflado artificialmente un acuerdo de patrocinio, a que un club tuviera que demostrar que no lo había hecho”. En caso que no lograron justificarlo, se le presentarían cargos.
“‘La tiranía de la mayoría’, afirmó el Manchester City, y todos se rieron. Se llama democracia, se burlaron (...) Desde que se introdujo el Fair Play Financiero, cualquiera que sea su forma de manifestación, siempre ha estado dirigido a clubes concretos. Primero el Chelsea, luego el City, ahora Newcastle”, aseguró. Al mismo tiempo que volvió a simplificar un tema legal, que al fin y al cabo, para él se resuelve en la cancha: “Si Guardiola es tu entrenador, es muy posible que ganes la liga; y si no lo es, probablemente tú no lo harás”.