Las dos caras de Boca: del brillo contra River a un sinfín de problemas
Si bien la victoria en el Superclásico parecía ser el principio de un Xeneize arrasador, el equipo de Diego Martínez fue autodestructivo en menos de un mes y no paró de recibir golpe tras golpe.
Hace tan solo 27 días, Boca logró eliminar a River en los cuartos de final de la Copa de la Liga 2024 siendo amplio dominador del trámite y dejando, después de muchos Superclásicos, una imagen de superioridad ante su clásico rival. Sin embargo, cuando parecía ser el principio de algo bueno, los de Diego Martínez fueron autodestructivos en menos de un mes y no pararon de recibir golpes.
Cinco días después, el cuadro azul y oro debió dar vuelta rápido la página al enfrentar a Estudiantes de La Plata en la semifinal de la Copa LPF en Córdoba y, si bien jugó bien y empezó ganando con gol del uruguayo Miguel Merentiel, un error echó todo por la borda: Cristian Lema cometió una falta increíble en el área, el Pincha anotó el penal para empatar el partido y en la tanda definitiva se impuso para pasar a la final y posteriormente ganarle el título a Vélez.
Esa fue otra desilusión más para un Boca que luego viajó a Paraguay para medirse ante Sportivo Trinidense y dependió de un tremendo golazo, de tiro libre, de Edinson Cavani sobre el final para ganarle con lo justo a un equipo de menor categoría, después de un partido que en el trámite fue de los peores en el ciclo de Diego Martínez.
Y como si eso fuese poco, la victoria contra Trinidense no levantó al equipo y Boca protagonizó otros dos traspiés: perdió con Atlético Tucumán de visitante en el debut en la Liga Profesional y Fortaleza se lo empató sobre la hora, en La Bombonera, por un error conceptual: los jugadores quedaron mal parados al ir a buscar un córner a favor y los brasileños anotaron por una contra perfecta.
Con la igualdad, es casi un hecho que el Xeneize quedará segundo en el Grupo D y esperará por un tercero de la Libertadores en los 16avos de final de la Sudamericana...
Más allá de los resultados que llevaron a Boca de ser de los mejores equipo de la Argentina a este presente golpeado, lo cierto es que el técnico sufrió una seguidilla de lesiones en la defensa que impactaron en el rendimiento: Marcos Rojo (desgarro), Aaron Anselmino (una molestia en el isquiotibial izquierdo), Nicolás Figal (desgarro) y Cristian Lema (distensión).
Esas bajas se sumaron a Nicolás Valentini (no es tenido en cuenta por no renovar su contrato que vence en diciembre), Lucas Blondel (esguince de rodilla derecha con ruptura del ligamento cruzado anterior) Exequiel Zeballos (rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha) y jugadores que no utilizan por decisión técnica: Jorman Campuzano, Juan Ramírez, Ezequiel Bullaude y Norberto Briasco.
Y las malas noticias no terminaron ahí. En las últimas horas, Pol Fernández anunció que no renovará su vínculo que termina a fin de año y el DT decidió borrar a Darío Benedetto, con quien se enojó tras el festejo de cumpleaños el pasado jueves por la noche (las fotos y videos se viralizaron) y lo mandaron a la casa el viernes sin entrenar.
