Ferrari se carga de esperanza

Leclerc secunda el argumento del jefe Vasseur y confía en presionar a los Red Bull: “Estoy seguro de que es cuestión de tiempo, estamos acortando distancias”.

Carmen Ruiz

As

Si después de la actuación en Jeddah Corniche fue Fred Vasseur, jefe de la escudería, quien celebró y destacó los progresos del SF-24 al mismo tiempo que alabó la actuación de un Leclerc que metió al monoplaza italiano en el podio con la vuelta rápida, el monegasco tampoco quiso desaprovechar la situación por la que están atravesando en este inicio de temporada (donde suman dos podios con el de Sainz en Bahréin) para recordar que los de Maranello, han sido el rival más cercano de Red Bull en las dos primeras rondas del curso. Eso no quita que para todas las escuderías el monoplaza energético parezca inalcanzable, pues Verstappen sentenció la primera victoria del año con 25 segundos de margen frente a Carlos, pero el haber reducido esa brecha en Arabia llena de esperanza al equipo rojo para lo que queda de curso.

Leclerc vio la bandera a cuadros con una brecha de 18 segundos frente al ganador. Los siete segundos de diferencia entre un domingo y otro los achaca el monegasco a “pequeños pasos en la dirección correcta” y para Charles, la carrera en Jeddah Corniche fue “positiva”. Más allá de por el podio, por ratificar que “en los últimos seis o siete meses, somos (Ferrari) el equipo que más ha mejorado y poco a poco estamos acortando distancias”. “La diferencia sigue siendo bastante grande”, reconoce el monegasco, ante la evidencia de una victoria tan abultada. Pero al menos, según las estimaciones de Vasseur, han recortado “la mitad de la diferencia del año pasado”: “Estábamos a 1.1 segundos y ahora, a cuatro o cinco décimas de Red Bull”.

Si los cálculos no fallan en la sede de Maranello, es evidente que el buen trabajo se está reflejando sobre el asfalto y Leclerc está convencido que, de continuar en la misma línea, “es cuestión de tiempo que pongamos a Red Bull un poco más bajo presión”. El argumento casa a la perfección con las palabras del jefe, que incluso se atrevió a insinuar que “ahora, con una buena salida, se puede luchar” y aseguró, que si Ferrari consigue dar un paso más, “se puede ponerles bajo presión”. ¿Llegará ese paso en Australia (próxima cita del calendario del 22 al 24 de marzo)? Charles lo descarta: “No creo que tengamos muchas cosas nuevas en Melbourne”.

El plan de cara al próximo gran premio en Ferrari, además de volver a recibir a un Carlos Sainz que a pesar de su operación de apendicitis ya se sentó junto a los ingenieros un día después en Yeda para analizar datos de telemetría, pasa por “maximizar el paquete que tenemos en este momento”. “Ahí es donde estamos ahora mismo”, insiste un Leclerc, que a pesar de no rebajar la euforia que se respira en estos momentos en Maranello, también deja paso al realismo en esa ambición por alcanzar al monoplaza energético: “Probablemente tendremos que esperar y ver cada vez que tengamos piezas nuevas para el coche qué tipo de paso damos hacia adelante. A partir de ahí esperaremos que eso nos acerque a Red Bull”. Les quieren en el punto de mira.