Europol incluye a los aeropuertos Viru Viru y El Alto en lista para controlar el tráfico de drogas
Europol ejecutó una semana de acción -liderada por España- contra el tráfico de drogas en 61 aeropuertos del mundo. Este trabajo se centró en controles del tráfico de pasajeros y carga en vuelos directos y de conexión, principalmente desde América a Europa. En esa acción contra el narcotráfico se incluyó a los aeropuertos bolivianos de El Alto, en La Paz, y Viru Viru, en Santa Cruz.
En otros países de la región se incluyó a aeropuertos de Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador y Perú. Además, este trabajo se desarrolló en coordinación con las policías de diferentes países, incluida la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn).
“Durante la semana de acción, las autoridades involucradas realizaron controles a los pasajeros y sus equipajes, así como a los paquetes y envíos de carga, en 61 aeropuertos importantes. Los controles tenían como objetivo detectar la posesión o tráfico de drogas, especialmente cocaína, procedentes de América Latina. Otro objetivo era mejorar la cooperación entre la policía y las autoridades aduaneras de ambos lados del Atlántico”, destaca un comunicado de Europol.
En la pasada gestión, Bolivia activó una negociación con la UE para el intercambio de información con la Europol. El entendimiento apuntaba a mejorar la lucha contra el narcotráfico, así como el crimen organizado. La semana pasada, en un evento en la ciudad de La Paz, la región latinoamericana firmó diferentes acuerdos con la UE. Además, Bolivia lo hizo con España. En estos convenios se estableció, entre otros puntos, el intercambio de información para enfrentar el narcotráfico.
En el trabajo que realizó la Europol se desarrolló una fase operativa centrada en la intensificación de la seguridad en los 61 aeropuertos. Según la entidad se preparó una fase preliminar de inteligencia y eso condujo a un análisis de información relevante relacionada con los flujos de narcotráfico, la identificación de posibles sospechosos y modus operandi, además del desarrollo de actividades coordinadas a realizarse durante la semana de acción.
En este operativo se arrestaron a 46 personas, se decomisó 356.464 kilos de marihuana, 354.209 kilos de cocaína, 37 kilogramos de drogas sintéticas101.559 kilos de otros tipos de estupefacientes. Se desconoce si en los aeropuertos de Bolivia se logró resultados.
Otros aeropuertos
Según el informe de Europol también se incluyeron aeropuertos de Europa y África y el trabajo fue coordinado con las policías de diferentes países, incluido la Felcn. Otras agencias que también aportaron a este trabajo de control fueron Frontex, Interpol y Aircop, que es un programa de comunicación aeroportuaria de la ONU.
Bolivia, la pasada gestión, desarrolló negociaciones en Bruselas, la sede de la UE, para ejecutar la coordinación entre la Felcn y la Europol, sobre todo en temas de narcotráfico. “Es una decisión de la Comisión Europea que ha dado luz verde para comenzar con este diálogo con el Gobierno (de Bolivia)”, remarcó en septiembre de 2023 el embajador de la UE en Bolivia, Michael Dóczy.
La Europol ya coopera con varias naciones de Sudamérica. De hecho, se han ejecutado operativos conjuntos, especialmente en Paraguay y Brasil, para anular a las organizaciones que trafican cocaína con destino a Europa.
En 2023 hubo críticas al Gobierno porque España, en algunas situaciones, decidió no coordinar con la Policía boliviana varios operativos antidroga. Uno de ellos fue el que un avión alquilado de Boliviana de Aviación (BoA) transportó hasta Madrid media tonelada de cocaína desde el aeropuerto de Viru Viru.
Sobre este caso, solo se detuvieron a funcionarios de mandos medios de BoA, de la Felcn y del aeropuerto de Viru Viru. La investigación no llegó a los “peces gordos” y ahora está congelada.
La semana pasada, la ciudad de La Paz fue sede de la reunión anual del Copolad III, que es un programa de cooperación financiado por la UE con un presupuesto de 15 millones de euros y un plazo de ejecución de cuatro años desde febrero de 2021. En este encuentro se decidieron varios puntos.
Entre los temas abordados en la reunión del Copolad III se discutió la adaptación de las políticas a los nuevos contextos sociales, la necesidad de contar con evidencia científica y aumentar la conexión con la sociedad civil y los usuarios y usuarias de drogas.
Asimismo, las ponencias destacaron la importancia de la mirada hacia la vulnerabilidad, y la inclusión social y el aterrizaje de políticas, la innovación de las propuestas de desarrollo alternativo y la necesidad de atajar el poder económico del narcotráfico.
En este evento también se subrayó la necesidad de la buscar alternativas penales a los eslabones más débiles del narcotráfico, como es el caso de las mujeres en situación de vulnerabilidad. Los representantes de las Agencias Nacionales de Drogas de los países subrayaron el valor añadido del programa para la mejora de sus políticas públicas y la utilidad de sus diferentes enfoques como el territorial, la coordinación interinstitucional, la movilización del talento público y el establecimiento de alianzas estratégicas con redes y organismos internacionales.
“Lo más importante de un encuentro de esta naturaleza es que tenemos preocupaciones en común, tanto en la interdicción al narcotráfico como todo lo que atañe a esta problemática de drogas, sea en la reversión, el desarrollo integral y sostenible, el consumo, los derechos humanos, el medio ambiente entre otros. Nuestros países pueden ser muy diversos, pero vivimos en un mundo y eso es lo que nos hace es que tengamos que actuar de manera unida”, destacó el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo.
El evento de Copolad III dio paso a la reunión de Alto Nivel del Mecanismo UE-CELAC de Coordinación y Cooperación sobre drogas. En este espacio se tendió puentes de diálogo para intereses comunes y el fomento de la cooperación en este ámbito. Además, se llegó a acuerdos para evitar el lavado de capitales y la prevención del narcotráfico. En este aspecto, también se decidió que las policías de la región pueden intercambiar información con las de Europa.
