‘Star Wars’: este fue uno de los grandes errores que favoreció el ascenso de la Primera Orden

La errática estrategia militar de la Nueva República dañó sus mecanismos de defensa y contribuyó a que el Imperio pudiera crecer en las sombras hasta su transformación en una nueva entidad.

Borja Ruete
As
Con la explosión de la Segunda Estrella de la Muerte sucumbieron los Sith que dominaban la galaxia. Darth Sidious, el emperador Palpatine, fue asesinado por su aprendiz, Darth Vader, que en el último momento regresó a la luz. La derrota del Imperio en Endor no supuso el final del Imperio Galáctico, que dominaba múltiples sistemas de manera férrea. La guerra civil, lejos de acabar, todavía iba a presentar batalla en varios frentes. No sabemos exactamente el cómo, porque la historia del Gran Almirante Thrawn todavía no se ha desarrollado en el nuevo canon, pero sí conocemos un error impulsado por la canciller Mon Mothma, anterior senadora y lideresa de Rebelión.

La trilogía de novelas ‘Consecuencias’, de Chuck Wendig, retoma la historia de ‘Star Wars’ tras los acontecimientos de ‘El Retorno del Jedi’. La guerra entre la recién instaurada Nueva República y el viejo régimen parecía abocarse a su final, y en Coruscant, el Gran Visir Mas Amedda quedó atrapado entre dos frentes. Lideraba el Imperio Galáctico sin ningún poder efectivo, aunque en un principio intentara mantener lo que quedaba en pie de una pieza. No duró demasiado: a la muerte de Palpatine, su reino empezó a fragmentarse. La batalla llegó hasta la capital y Amedda tuvo firmar el acuerdo de capitulación, lo que derivó en el final oficial y aparente del Imperio. En la práctica, caudillos y señores de la guerra controlaban los remanentes imperiales, un problema al que la República Galáctica no dio la importancia que merecía.

Star Wars, Primera Orden
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La Primera Orden.

El Acta de Desarme Militar: los malos se la cuelan a la República

La inoperancia republicana se deja entrever en ‘The Mandalorian’ y en ‘Ahsoka’. Por ejemplo, cuando la general Hera Syndulla advierte del posible regreso del Gran Almirante Thrawn es cuestionada e incluso ridiculizada; su testimonio, desdeñado. A esta ceguera se le suma el error garrafal de desmilitarizar la República. En su época de senadora previa al Imperio, Mon Mothma trabajó para desescalar las ansias militares de Palpatine. Tras su caída, aún en guerra civil, se planteó el Acta de Desarme Militar, aprobado al concluir la Batalla de Jakku. El ejército redujo su tamaño en un 90%, a fin de reflejar mejor los valores democráticos de la Nueva República. Craso error.

La senadora Leia Organa se opuso al Acta de Desmilitarización, puesto que vio el peligro que ello acarreaba. De las buenas intenciones se aprovecharon los conspiradores (algunos dentro del senado, como se lee en ‘Star Wars: Linaje’) y los herederos del Imperio. De ahí que la transformación del antiguo régimen en la Primera Orden se pudiera realizar sin que la Nueva República se diera cuenta. Leia, por su parte, violó la ley y fundó un movimiento militar pensado para efectuar maniobras prohibidas. El resto se cuenta en las secuelas: el desafío de la Primera Orden, la Resistencia y el arco final de Palpatine.

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