Elecciones en Boca: por qué el resultado del domingo puede extender la batalla en la Justicia
El 17 habrá comicios en la Bombonera
Sin embargo, esto no significa que cuando se proclame a la fórmula ganadora, todo concluya. Ocurre que la oposición examina con lupa un fallo que no esperaban, y menos de manera tan pronta. De hecho, si existía al menos un punto que uniera a ambos lados era justamente ese: todas las partes consideraban que la Cámara iba a expedirse entre martes y jueves, “con suerte”.
Se repite: fue toda una sorpresa cuando este lunes hubo novedades desde los Tribunales. Tanto es así que la primera medida del club fue suspender la fiesta prevista para este martes, 12 de diciembre (12/12), por el Día del Hincha de Boca, precisamente para enfocarse en lo más importante: acondicionar el club para los comicios.
Si bien los números que manejan el oficialismo y la oposición arrojan un hipotético triunfo de la fórmula compuesta por Juan Román Riquelme y Jorge Ameal, los hechos deben consumarse. En caso de que la realidad concrete esas previsiones, será difícil imaginar un escenario judicial en el que prospere el reclamo inicial de los letrados de la oposición. Sucede que por estas horas ellos están revisando el fallo que revocó la suspensión inicial, ya que consideran que se apoya en algo inexacto.
Ocurre lo siguiente: si bien es cierto que (como dice el Estatuto de Boca) después de un año ya nadie puede cuestionar la condición de un socio y su derecho al voto, también se da un escenario que contradice lo primero y tiene relación directa con lo que está escrito en el reglamento de comicios. Pasa que cuando el oficialismo hace público el padrón habilitado para votar, las otras partes intervinientes (sean una, dos o las que fueren) tienen un plazo de “hasta tres días antes de la votación” para realizar su descargo, elevar sus reclamos o, como ocurrió en este caso, hacer las denuncias pertinentes en la Justicia Civil y/o en la Inspección General de Justicia (IGJ).
Si, por el contrario, el resultado de los sufragios termina siendo más parejo, es muy probable que la batalla legal continúe. Ante ese posible escenario, la Justicia puede determinar que el reclamo no es válido y nada cambiará, o bien aceptar el planteo y tomar decisiones en consecuencia. Una de ellas sería la de invalidar los comicios y reprogramar una segunda votación.
Cabe destacar que el hecho de que la Cámara haya revocado la medida cautelar de la jueza Alejandra Abrevaya, que había suspendido los comicios previstos inicialmente para el 3 de diciembre luego de detectar anomalías en el padrón electoral -tras una presentación de la oposición-, no significa que Abrevaya no siga teniendo la causa bajo su órbita. De hecho, las fojas regresaron a su despacho.
Según pudo averiguar LA NACION, nada ocurrirá de aquí al domingo, aun cuando la oposición tiene argumentos legales para hacer una nueva presentación y elevar la causa para que defina la Corte Suprema. Eso no sucederá.
El único que se expresó tras la decisión de la Cámara de Apelaciones fue Andrés Ibarra. En diálogo con TyC Sports, el candidato a presidente por la oposición consideró: “Con el fallo de ayer habría que ir despejando el tema porque revocó la decisión de la jueza, por lo cual se vota el 17, que es lo queríamos. Nosotros siempre quisimos votar. Obviamente, contemplando la corrección del padrón que tiene cantidad de irregularidades que fueron comprobadas por el peritaje de la primera jueza. El fallo de ayer pasa por encima de eso, por un concepto técnico legal y lo que dice es que se levanta el tema y se puede votar mas allá de que subsiste el tema del padrón que esta mal y que de nuestro punto de vista se debe corregir”.
Además, agregó: “Defender al socio es respetar el estatuto y la calidad institucional de Boca y es lo que no pasó con este padrón que nosotros cuestionamos”. En este punto, recordó: “La (primera) jueza confirmó este problema que nosotros habíamos visto, lo vio con mucha calidad y por eso nosotros sostenemos que está mal y debe corregirse. Pero si la decisión de la cámara es que se vote, votaremos”.
Con lo definido por la Justicia también se echó por tierra algo que jamás formó parte del abanico de posibilidades, y que el oficialismo utilizó a su favor en estos días de tensión y disparates mediáticos de un lado y del otro. La supuesta intervención es una carta que nunca estuvo en el mazo. Para que eso ocurra debería haber acefalía en el club, es decir que mueran o renuncien el presidente, los tres vices, todos los vocales titulares y todos los vocales suplentes. Imposible. No existió esa alternativa que la oposición calificó como “campaña del miedo”.
La del domingo será una fiesta xeneize. Por primera vez, los socios votarán sobre el césped de la Bombonera, lo que generará un acontecimiento único para miles de asociados que jamás pudieron disfrutar del templo del lado de adentro del campo.
Allí, optará por una de las dos opciones una masa final de 94.188 socios activos, entre las que aparecen los ya famosos 13.000 socios que, según la denuncia opositora, habrían alcanzado la condición de activos entre septiembre y octubre de 2021 (antes del cierre del padrón utilizado en esta elección), sin respetar la prioridad por antigüedad que establece el artículo 19 del Estatuto.
El número inicial (cerca de 98.000) bajó porque en los últimos días se cruzó el padrón con la información del ReNaPer (Registro Nacional de las Personas) y fueron separados los fallecidos (entre ellos, Diego Armando Maradona). Esto es algo que suele ocurrir en la previa de cada votación, debido a que la mayoría de las familias no está obligada a avisar al club cuando algún socio fallece.
Lo único concreto es que el domingo 17 de diciembre, de 9 a 18, los socios activos de Boca elegirán a los directivos que conducirán al club durante los próximos cuatro años. Y eso, en el volátil mundo Boca, no deja de ser una noticia saludable.
