Terapia de choque de Xavi: se encierra 45 minutos con la plantilla

El técnico decidió coger el toro por los cuernos, convocando a todo el vestuario a una reunión catártica, en busca de una reacción inmediata de sus jugadores.

Javier Miguel

As

Xavi Hernández era consciente que tras una crisis de juego tan evidente tenía que ser el primero en dar un paso adelante. La pésima imagen del equipo en Anoeta se refrendó el martes en Hamburgo, en uno de los peores partidos de la era Xavi, por lo que el técnico blaugrana decidió convocar una reunión extraordinaria a toda su plantilla, encerrarse durante casi una hora en el vestuario y decirse las cosas a la cara en busca de soluciones para revertir esta situación y evitar que se enquiste.

Nos cuentan desde el vestuario que fue una reunión muy positiva, donde varios jugadores alzaron la voz y dieron su punta de vista -especialmente activos estuvieron los capitanes Ter Stegen y Ronald Araújo-, pero también participaron veteranos como Robert Lewandowski e Ilkay Gündogan. Eso no quiere decir que los más jóvenes no participaran, sino que los jugadores de más peso específico ejercieron de portavoces en el grupo.

Tras una larga exposición por parte de Xavi, donde apeló al orgullo propio y al compromiso, el técnico quiso conocer la opinión de sus jugadores, pidiendo que se expresaran abiertamente. Fue el momento más intenso y donde se pudo entablar un diálogo constructivo y empático entre todas las partes.

Tanto el staff como los jugadores llegaron a la conclusión que se ha de cerrar esta sangría de juego cuanto antes, que no hay nada perdido, pero que no puede repetir la imagen que ha ofrecido el equipo en estos dos últimos partidos, que la situación es reversible y que ante el Alavés tienen una gran oportunidad de demostrar ante su afición que el equipo ha recuperado las buenas sensaciones.