El Atlético presenta candidatura
Los rojiblancos suman 25 puntos en sus diez primeros partidos de Liga. Solo lo mejoró dos veces... que ganó el título. Grandes sensaciones de juego y goles.
Contra el Alavés, el equipo de Simeone acabó con el 63,6% de la posesión, remató siete veces a portería (sin tener en cuenta el gol anulado a Griezmann por haber sonado el silbato del árbitro antes de que se introdujese a la red), otras tres intentonas fuera y anotó dos goles que aumentan su balance a un total de 72 en este año 2023. Tan solo el Borussia Dortmund (78), el Bayern (77) y el Manchester City (también 72) se encuentran en esas cifras. Real Madrid (63), Girona (61) y Barcelona (59) son los más cercanos en España, según los datos de Opta.
Hablar de un Atlético defensivo queda tan obsoleto como hacerlo de un sistema Amarrategui por utilizar una formación con tres centrales y dos carrileros. En realidad, es difícil saber si el equipo rojiblanco lo hace. El Cholo juega constantemente con la posición de Witsel y Hermoso, que se suman al centro del campo en ataque para ayudar en las funciones de inicio a Koke. El madrileño ya es un mediocentro cada vez que el Atlético ataca por su costado. Los carrileros, bien sea Lino o Riquelme en la izquierda y Nahuel Molina en la derecha, son auténticos extremos, máquinas de percutir por los costados.
Griezmann, Morata, Koke...
Y la delantera se encuentra en estado de gracia. 18 dianas entre Griezmann y Morata, nueve cada uno. La pareja de moda en España. Para competir por títulos, Simeone ha necesitado una referencia goleadora, el delantero de los 20 tantos. En octubre, sus dos titulares ya han recorrido medio camino. En estado de gracia, Griezmann es el jugón del equipo, todo balón que pasa por sus botas mejora. Si Bellingham está en boca de todos, nada tiene que envidiar el francés como candidato a MVP de la competición... por segundo año consecutivo. Lleva siete tantos en Liga y dos en Champions. Y Morata está más efectivo que nunca, el goleador que necesitaba el equipo estaba en casa. Es más, a sus nueve tantos de rojiblanco (seis en Liga y tres en Champions) añade cuatro con España en estos dos parones de inicio de campeonato.
En la recámara está un Correa que siempre suma. Cuando se le necesita es el desatascador. Contra el Cádiz jugó lesionado, infiltrado y anotó un doblete determinante para sumar los tres puntos. Diferente es el caso de Memphis, cuyas grandes cifras goleadoras chocan con la imposibilidad de tener continuidad por las lesiones. En el centro del campo todo pasa por Koke. El Atlético ha ganado ocho de los nueve encuentros en los que ha participado y empató en Glasgow. Sin él sumó un triunfo en cuatro. Contra el Alavés (127 pases buenos) dio la asistencia para el gol de Morata como había hecho ante la Real Sociedad para Lino. El fútbol vuelve a ir a una marcha más en su cabeza.
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Y, durante su ausencia dio un paso adelante Pablo Barrios. El canterano, que cumple un año desde su debut, está completamente asentado en la primera plantilla. A sus 20 años es una de las grandes sensaciones de futuro. Como Lino (23) y Riquelme (23). Saúl ha recuperado el brillo y el protagonismo, Llorente revoluciona desde el banquillo, Witsel pone la entereza y salida de pelota, cuando Giménez y Savic tienen continuidad, Oblak está mucho más protegido, Hermoso luce en el juego de posesión...
Es pronto para hacer análisis y exigir pelear con dos equipos mayor presupuesto y argumentos. Pero el equipo rojiblanco se encuentra a tres puntos de la cabeza con un partido menos. Una cabeza donde se cuela el extraordinario Girona junto al Real Madrid. Ya ha superado al Barça y en el derbi dio un golpe sobre la mesa para la única derrota del equipo blanco. No es el favorito, pero sí está preparado por si la oportunidad se presenta. El Atlético tiene derecho a soñar en grande.
