La guerra de Rusia en Ucrania y la proliferación de grupos terroristas en los países Occidentales

Crecen los grupos nacionales y extranjeros que apoyan la invasión rusa constituyen una amenaza futura para Estados Unidos y sus socios europeos

George Chaya

Infobae

El viaje del presidente ucraniao Volodimir Zelensky a los Estados Unidos nuevamente colocó a la guerra que padece su país a manos de la Rusia de Vladimir Putin en el centro del debate occidental. El presidente Zelensky, hizo sonar las alarmas en la reunión de las Naciones Unidas y solicitó más acciones internacionales contra Moscú.

Sin embargo, el foco de atención de Washington mas allá de entender y ratificar su apoyo a la posición de Zelensky, ha puesto sus atención en los grupos terroristas nacionales y extranjeros que apoyan la invasión rusa y que los estadounidenses creen que constituyen una amenaza futura para Estados Unidos y sus socios europeos que apoyan a Ucrania. Así lo describió el Departamento de Seguridad Nacional (DHS por sus siglas en ingles) en su evaluación anual de amenazas luego de la cumbre de Naciones Unidas.

En esa dirección y en relación con la seguridad, un grupo de senadores republicanos se han expedido a través de un comunicado llamando a frenar los grupos de activistas radicalizados que inexorablemente pueden derivar en terrorismo interno. El grupo de senadores estadounidenses ha indicado que Rusia no se detendrá militarmente en Ucrania y advirtieron que también los estados bálticos y Kazajistán están bajo amenaza, y señalaron que la posibilidad de una guerra nuclear aumenta cuanto más se prolonga el conflicto, pero que del mismo modo esa guerra ha dado al nacimiento de distintos grupos de militantes anti-occidentales que están haciendo de la violencia su expresión política, lo cual amenaza peligrosamente a los países occidentales y democráticos.

Al mismo tiempo, los congresistas acompañaron la disertación de Zelensky en el seno de la ONU e instaron a apoyar un plan de paz que presione a Rusia a retirarse de Ucrania y a dejar de apoyar grupo violentos en Occidente. Esta posición también fue acompañada por el discurso del presidente Joe Biden, quien mencionó directamente al Departamento de Seguridad Nacional que ya ha alertando sobre este problema.

Se debe enfrentar esta agresión y el accionar de grupos que apoyan a Putin frente a su invasión sobre el pueblo ucraniano y disuadir a posibles agresores que, en forma de organizaciones terroristas participan en la guerra de Ucrania y pueden incluso golpear nuestros países brindando apoyo a Rusia con acciones terroristas, señaló el presidente Biden, quien prometió a Zelensky hablar con las potencias que disponen del poder del veto en del Consejo de Seguridad del Organismo supranacional, aunque ello no parezca que de momento pueda suceder dado el apoyo de China como socio de Rusia y que también cuenta con el poder de veto neutralizaría la iniciativa. Sin embargo, esta ha sido una recomendación que el presidente estadounidense ha recibido de su Seguridad Nacional.

Para tratar ese punto, Zelensky se reunió el jueves con legisladores republicanos y demócratas en el Capitolio mientras el Congreso considera la medida que acompaña la nueva ayuda militar a Ucrania para mantener a su país con capacidad de combate en la lucha por liberar su país de la agresión de Moscú. Aunque ese proyecto podría enfrentar resistencia en el seno del Consejo de Seguridad por parte de China y desde luego de la propia Rusia que no está dispuesta a ceder su capacidad de veto en el organismo.

Al mismo tiempo, Kevin McCarthy (republicano por California) declaró que la invasión de Putin y los daños que ha causado el pueblo de Ucrania es una acción salvaje que no hace mas que sumar atrocidades sobre su población civil, por lo que se debe solicitar rendir cuentas a Moscú y exigirle que deponga su actitud y ponga fin a la ocupación y a la guerra, pero también que cese en el apoyo a sus grupos afines fuera de Rusia, ya que esos grupos son conocidos en muchos casos por su accionar terrorista internacional y pueden atacar en distintos sitios de Europa occidental, incluso en suelo estadounidense.

En el marco de la guerra de Ucrania, la amenaza del terrorismo permanece prácticamente sin cambios, pero los funcionarios de Seguridad Nacional advirtieron que los elementos solitarios al igual que los grupos pequeños portadores de ideologías violentas representan un riesgo grave para las sociedades democráticas que están siendo monitoreados y de los que se evalúa un peligroso crecimiento para los meses próximos.

Los grupos y las organizaciones terroristas, tanto locales como extranjeros siguen siendo una de las principales amenazas para Estados Unidos y esa amenaza crece por la guerra de Ucrania en virtud de las alianzas que ha tejido el Kremlin el ultimo año, por lo que se cree que el peligro de exteriorizaciones violentas por parte de individuos radicalizados dentro mismo de Estados Unidos seguirá siendo alta mientras la guerra continúe, dijo a Infobae un alto funcionario del DHS que solicitó reserva de identidad. Esta amenaza está marcada por delincuentes solitarios y pequeños grupos de apoyo a Putin que pueden llevar a cabo ataques sin previo aviso. El información del DHS, indica que desde enero de 2022, extremistas violentos domésticos han llevado a cabo tres ataques fatales que causaron 19 muertes que aun son investigadas en profundidad, como se investigan las distintas amenazas potenciales contra Estados Unidos. La infraestructura crítica estadounidense sigue siendo un objetivo potencial de ataques terroristas y esto es altamente peligroso para el modo de vida diario de los estadounidenses, ya sea mediante el lanzamiento de ataques cibernéticos o físicos.

La situación hace que se estén revisando las políticas migratorias por lo que se está monitoreando un número récord de solicitudes de visados e ingresos por las fronteras que puedan involucrar la seguridad a manos de personas pro-rusas señaladas con posibles vínculos terroristas. El DHS indicó que la inclusión de personas sospechosas en las listas podría significar que ellas estén asociadas con el terrorismo contra los Estados Unidos, así como aquellos directamente involucrados en actividades terroristas e infiltrados en los países que apoyan a Ucrania y le brindan ayuda militar.

La información indica también que los cambios realizados por la administración Biden para limitar el número de personas a las que se les permite ingresar al país se centra en ciudadanos rusos, bielorrusos y de países que cuentan con organizaciones violentas que pudieran ejecutar actos terroristas para generar caos en beneficio del Kremlin.

Sobre los adversarios y potenciales enemigos extranjeros, las agencias de inteligencia europeas y estadounidenses advierten que pueden atentar también con ataques cibernéticos sobre blancos militares sensibles, pero descartan ciberataques sobre compañías privadas y contratadas por los gobiernos que brindan soporte a Ucrania. Esta amenaza se esta acelerando con los avances en la Inteligencia Artificial, según las agencias de contra-terrorismo.

El informe distribuido entre los aliados occidentales europeos y estadounidenses marca un cambio en materia de amenazas potenciales, algo que la contra-inteligencia occidental ha incorporado como prioridad en la lucha contra el terrorismo y que se encuentra en su momento de mayor actividad.