Bernardo Silva pone a Arabia Saudí en una nueva dimensión: de liga de 'retirados' a fichajes top de Europa
Los clubes de la Saudi Pro League empiezan a gastar dinero en jugadores de primer nivel
RUBÉN JIMÉNEZ, MarcaCon un presupuesto ilimitado, el estado saudí empieza a pasearse por los escaparates de los clubes europeos viendo qué tiene el cartel de transferible y arrasando con todo, empujando con el brazo al carrito aquello que ve apetecible para después repartir entre sus equipos. Rúben Neves, Ziyech, Brozovic, Thomas, Koulibaly... y Bernardo Silva.
El portugués es la llave que abre la puerta a una nueva dimensión en el fútbol saudí. Un futbolista clave en el Manchester City campeón de Champions, campeón de la Premier y campeón de la FA Cup, estrella de la selección portuguesa... en definitiva, un top 10 mundial que con 28 años hace las maletas y deja la élite europea para liderar la élite saudí.
La llegada, prácticamente cerrada, de Bernardo Silva a la Saudi Pro League es un aviso serio a los clubes europeos... e incluso a la Premier. Ha aparecido un rival, capaz de igualar y superar sus ofertas económicas y con potencial para pagar fuertes traspasos. Al Hilal se ha gastado 55 kilos en Rúben Neves (26 años, con interés del Barça y otros clubes europeos), 25 en Koulibaly y está a punto de cerrar al portero Mendy, otros clubes planean gastarse otros 40 millones para sacar a Thomas del Arsenal y no guardan el talonario, con Ziyech casi fichado y Brozovic en el punto de mira.
Un plan estatal para hacerse con el Mundial 2030
El príncipe heredero de Arabia Saudí Mohamed bin Salmán anunció hace unas semanas el lanzamiento de un plan nacional de desarrollo del fútbol en el reino. Después de la compra del Newcastle (exitosa, vista la clasificación para la Champions de las Urracas), los saudíes han decidido gastar dinero en su propia liga con la intención de hacer mirar al mundo hacia Arabia. Hacia sus campos de fútbol concretamente.
En un plan parecido pero mucho más ambicioso que el de Qatar, Arabia busca pisar sobre las huellas de su vecino para hacerse con el Mundial 2030 a base de millones. El emirato construyó un relato a través del balón para equipararse a los países con mayores garantías democráticas que sirve de inspiración a Arabia. Tras una reforma reciente, los cuatro clubes históricos del país (Al Hilal, Al Nassr, Al Ittihad y el recientemente ascendido de nuevo Al Ahli) pertenecerán en un 75% al fondo de inversión público de Arabia Saudí, el mismo fondo que es propietario del Newcastle. Es decir, del estado.
Cristiano Ronaldo (38 años), Karim Benzema (35 años) y N'Golo Kanté (32 años) ya esperan a la siguiente hornada de fichajes. Y por los perfiles y el dinero gastado, Arabia no quiere ser un paraíso dorado previo a la retirada para los futbolistas. Se quiere mostrar competente para luchar en atractivo con las grandes ligas europeas. En dinero no hay ni comparación.