Sin Carvajal ni Hazard, pero con Modric para la visita a San Mamés

El lateral se sigue recuperando de sus molestias en un abductor y el belga se torció un tobillo en la sesión del viernes. Pero el croata, que descansó en Copa, está listo para San Mamés.

Manu de Juan
As
Buenas y malas noticias para Carlo Ancelotti en el entrenamiento de esta mañana de sábado en la Ciudad Real Madrid de Valdebebas: el equipo blanco tendrá que afrontar la visita al Athletic Club, este domingo a partir de las 21:00 horas en San Mamés, sin Carvajal ni Hazard, ambos lesionados (tampoco con Alaba, lucas Vázquez o Tchouameni), pero sí podrá contar con Modric sin problemas. El Madrid se ejercitó en Valdebebas con 20 efectivos, entre ellos dos canteranos: el portero Luis López y el medio Javi Villar.

Carvajal se sigue recuperando de sus molestias en uno de sus abductores; el lateral saltó al césped de Valdebebas para hacer trabajo por separado junto al principal recuperador del equipo, José Carlos García Parrales. Mientras que Hazard, que se torció un tobillo en la sesión del viernes, se quedó trabajando en el gimnasio. Su lesión, en principio, no reviste gravedad ni requerirá pruebas, pero le impedirá jugar en San Mamés.

Nacho y Ceballos, en el once

Estas bajas se unen a las que ya se conocían de Tchouameni, Alaba y Lucas Vázquez. Ancelotti deberá afrontar la visita a San Mamés sin cinco futbolistas, tres de los cuales son teóricos titulares en el once de gala. Aunque no todo son malas noticias: Modric, que descansó en Copa del Rey ante el Villarreal, trabajó sin problemas y podrá jugar en Bilbao.

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EDUARDO CANDEL REVIEJODIARIO AS

De este modo, el once probable del Real Madrid en San Mamés será el formado por Courtois en la portería, Nacho como lateral derecho, Militao y Rüdiger en el centro de la defensa y Mendy como carrilero izquierdo, Modric, Kroos y Ceballos en el centro del campo (el utrerano, tras su gran partido en Vila-real, puede tener su oportunidad), y Valverde, Benzema y Vinicius en el ataque. Rodrygo, tras la bronca que le echó Ancelotti en La Cerámica por no saludarle en el cambio, sería el damnificado e iría al banquillo como opción para ser revulsivo en la segunda parte. Tampoco es descartable el concurso de Camavinga desde el inicio, aunque lo jugó todo en Vila-real y llega más cargado.

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