Las cuentas pendientes de Courtois

El belga, que nunca ha perdido contra el Atlético, llega al derbi tras las polémicas con la placa, las ratas de peluche, sus palabras sobre “el lado bueno de la historia” y el enfado rojiblanco.

Manu de Juan

As

Ancelotti ha dejado claro muy pronto que, con títulos en juego, el Madrid es Courtois y diez más. Ante el Cacereño, en dieciseisavos de Copa, la portería fue para Lunin, pero en cuanto el rival fue de Primera, el Villarreal en octavos, el ucranio fue al banquillo y el belga, a la portería. Y en cuartos, ante el Atlético, volverá a ser Courtois el elegido. No está siendo su mejor temporada, como tampoco lo está siendo del Madrid a nivel defensivo: ha recibido 28 goles en 28 partidos, es decir, uno por encuentro, y apenas ha dejado la portería a cero ocho veces (cinco con Courtois y tres con Lunin).

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DIARIO ASDiarioAS

Los problemas en el nervio ciático lastraron el inicio de temporada de Courtois, pero tras el Mundial está encontrando de nuevo su mejor nivel, como se pudo ver en la Supercopa: llevó al Madrid a la final, en la que evitó un castigo mucho mayor del Barcelona. Y mañana le toca verse las caras de nuevo con el Atleti, donde pasó tres temporadas. Sus números ante los rojiblancos son buenos: no conoce la derrota. Son 11 encuentros en total (dos con el Chelsea y nueve con el Madrid), con seis victorias, cinco derrotas y seis porterías a cero.

Courtois y “el lado bueno de la historia”

Aunque sus duelos con el Atleti exceden lo futbolístico: la afición no le perdona que fichase por el Madrid y se lo recuerda en cada derbi, en el que acostumbra a escuchar gritos de “rata” (en una ocasión, le arrojaron peluches del roedor). Su placa del Paseo Centenario ha sido vandalizada muchas veces y llegó a ser arrancada (y luego repuesta). Y provocó las iras colchoneras cuando dijo antes de la final de la Champions en París, en referencia a la de Lisboa en 2014: “Ahora estoy en el lado bueno de la historia”. Tanto que la Comisión Social del Atleti valora retirarle la placa y exigió una disculpa, que llegó a medias en forma de carta: agradecimiento por los años en el Atleti, pero también quejas por el acoso que recibe de su antigua afición. Será un derbi con varias cuentas pendientes...