La encrucijada de Brahim

El Milan quiere quedarse con él a largo plazo y negociará después del mercado de invierno con el Real Madrid, que valora traerle de vuelta.

Mirko Calemme
As
“Es un gran futbolista, con enorme calidad y muy útil por nuestra manera de jugar. Quiero que se quede, por supuesto”. Stefano Pioli, en mayo, fue muy claro en AS hablando sobre Brahim Díaz. El técnico en alguna ocasión le ha quitado protagonismo, pero siempre creyó en su talento y confía en él cada vez más.

El malagueño no empezó este curso siendo titularísimo debido a la llegada de Charles De Ketelaere. El belga costó 32 millones más tres en variables y es normal que se haya intentado apostar fuerte por él. Con el tiempo, no obstante, la falta de adaptación del ex del Brujas y el crecimiento de Brahim volvieron a cambiar las jerarquías. Autor de cuatro goles (uno de ellos, espectacular, ante la Juventus) y dos asistencias en 20 presencias, el español fue titular en las últimas nueve jornadas de Serie A y, según los datos de Olocip, es el cuarto jugador más decisivo del Milan con un valor de 4.42, detrás de Benancer, Tomori y Leao.

El Milan, según pudo saber AS, lo tiene clarísimo: tras dos años de cesión, quiere quedarse con él a largo plazo. De momento, no hay reuniones planeadas con el Real Madrid, pero los clubes hablarán de la situación una vez terminado el mercado de invierno. Los italianos están encantados con las características y el compromiso del jugador, que, como ha declarado a AS en julio, en San Siro está muy feliz, “tanto en el ámbito personal como profesional”.

En Italia hay gran optimismo sobre su continuidad, pero hay un factor enorme a tener en cuenta: la voluntad del Real Madrid. El club blanco, pese a las insistencias de Maldini (con el que hay una relación espectacular) nunca quiso conceder a los milanista una opción de compra. La entidad de Concha Espina apostó por Brahim, con una importante inversión, cuando apenas tenía 20 años y la idea de que, con el tiempo, pudiera tener espacio en el primer equipo. Tras un curso y medio de blanco (con 21 presencias y dos goles), Brahim ha empezado su aventura italiana en un club de exigencia máxima como es el Milan, siendo uno de los protagonistas de un scudetto esperado durante una década. El próximo partido será el número 100 en el club milanista, que le está mejorando bajo cualquier punto de vista y podría abrirle también las puertas del regreso al Bernabéu.

En el Madrid, tras las salidas de Bale e Isco, son probables para el próximo verano también las de Hazard y Asensio. Brahim en principio tendría sitio, entonces, para comenzar su segundo periplo madridista con 24 años y una enorme experiencia a sus espaldas. El Milan tiene otro plan: tocará hablarlo

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