Buscadores de tesoros recorren un pequeño pueblo holandés rastreando pistas sobre joyas robadas por los nazis
El Archivo Nacional en La Haya provocó que mucha gente viajara a Ommeren tras publicar un presunto mapa con una X marcada en rojo
Armados con detectores de metales, palas y copias del mapa en sus teléfonos celulares, los buscadores de tesoros han invadido Ommeren —una población de 715 habitantes unos 80 kilómetros al sureste de Ámsterdam— en busca de un tesoro de la Segunda Guerra Mundial basándose en el croquis publicado el 3 de enero.
“Sí, desde luego, es una noticia espectacular que ha hechizado a toda la aldea”, dijo el poblador Marco Roodveldt. “Pero no solo de nuestra aldea, también gente que no es de aquí”.
Sostuvo que “toda clase de gente ha estado cavando espontáneamente en lugares donde creen que está enterrado el tesoro, con un detector de metales”.
En principio no estaba claro si las autoridades podrían reclamar el botín en caso de que lo hallaran o si un buscador podía quedárselo.
Hasta ahora, no ha habido reportes de hallazgos. La búsqueda comenzó este año, cuando el Archivo Nacional efectuó su publicación anual de documentos para que los estudien los historiadores.
La mayoría no llamó la atención. Pero el mapa, que incluye un tramo de un camino rural y una X roja al pie de uno de tres árboles, se viralizó inesperadamente para trastornar la paz invernal de Ommeren.
“La historia misma nos ha dejado atónitos. Pero también la atención que ha suscitado”, dijo Annet Waelkens, investigadora del Archivo Nacional, al exhibir cuidadosamente el mapa.
Fotos publicadas en redes sociales a principios de enero mostraban gente cavando pozos de más de un metro de profundidad, a veces en propiedad privada, con la esperanza de desenterrar una fortuna.