El jefe de los mercenarios de Putin anunció que formará milicias en la frontera con Ucrania y tensó más su relación con el ejército ruso
Yevgeny Prigozhin, del Grupo Wagner, quiere construir escuelas para armar y entrenar a civiles: “Si quieres la paz, prepárate para la guerra”, advirtió
“Wagner está ayudando y seguirá ayudando a la población de las zonas fronterizas a aprender a construir estructuras de ingeniería, a entrenar y a organizar una milicia”, dijo Prigozhin según el servicio de prensa de su empresa Concord.
Afirmó que “un gran número de personas ya están dispuestas a defender su tierra”.
Te puede interesar: El jefe de los mercenarios de Putin reconoció que interfiere en elecciones extranjeras y amenazó: “Lo seguiremos haciendo”
Prigozhin indicó que el principal objetivo de Wagner era empezar a construir fortificaciones y escuelas de entrenamiento en las regiones de Belgorod y Kursk, que han sido objeto de fuego regularmente en los últimos meses en ataques atribuidos por Moscú al ejército ucraniano.
“Si quieres la paz, prepárate para la guerra”, dijo, insistiendo en que todo ruso tiene derecho a defender su patria como mejor le parezca.
Prigozhin reveló en septiembre por primera vez que fundó el grupo Wagner en 2014 para luchar en Ucrania y reconoció su presencia en África, Oriente Medio y América Latina.
Te puede interesar: Yevgeny Prigozhin, el contratista paramilitar favorito de Putin, admitió haber fundado el grupo Wagner y su presencia en América Latina
Esto se produjo después de que él y el Kremlin negaran durante mucho tiempo la existencia del grupo. Servir como mercenario sigue siendo ilegal para los rusos.
Los combatientes de Wagner han estado al frente de la ofensiva de Moscú en Ucrania y en septiembre apareció un video que parecía mostrar a Prigozhin visitando una prisión y ofreciendo contratos a los prisioneros para luchar a cambio de su liberación.
Funcionarios ucranianos afirman que Prigozhin ha estado enviando al frente a miles de soldados reclutados en cárceles rusas.
Prigozhin, que también ha sido acusado durante mucho tiempo de dirigir una “fábrica de trolls” para influir en las votaciones de los países occidentales, admitió el lunes haber interferido en las elecciones de Estados Unidos.
Este hombre de 61 años que se ganó el apodo de “chef” de Putin y que antes era un personaje en la sombra, se está convirtiendo en una figura cada vez más pública y los analistas dicen que podría estar considerando un papel político.
Este mes, Wagner abrió una sede en San Petersburgo, la segunda ciudad de Rusia.
Prigozhin se quejó el jueves de que el gobernador de la ciudad, Yevgeny Beglov, se ha negado a dejar que el centro funcione, acusándolo de promover los intereses de los “nacionalistas ucranianos”.