Lío en la Juventus: pidieron arresto domiciliario para Agnelli
La fiscalía de Turín cerró su investigación sobre las cuentas de los bianconeri, acusados de fraude contable. El juez de instrucción rechazó la medida para el presidente.
El tema de la investigación son las supuestas plusvalías ficticias en la compra y venta de futbolistas, los sueldos cancelados durante la primera ola de la COVID y facturaciones falsas: se trataría de fraude contable y falsas comunicaciones al mercado (la Juve cotiza en la bolsa). Según la reconstrucción de los fiscales Marco Gianoglio, Mario Bendoni y Ciro Santoriello tras 11 meses de trabajo, entre 2018 y 2020 los valores de varios jugadores se habrían decidido de “manera arbitraria” ante “las necesidades del balance en ese momento”. La misma razón que habría llevado a posponer los pagos de los futbolistas en 2020, que teóricamente iban a renunciar a cuatro meses de sueldo que, finalmente, solo quedaron en uno. Prueba de eso serían documentos “privados y secretos”, encontrados en oficinas externas al club, en el que la Juve se comprometía a pagar los sueldos “también en caso de traspaso del jugador”.
Entre estos documentos también estaría la “carta secreta” de Ronaldo, un documento que según algunas escuchas “no debería existir”. Los fiscales interrogaron a varios jugadores bianconeri y, con una rogatoria internacional, pidieron también la presencia de Cristiano, que, a través de sus legales, informó de que no habría viajado a Turín. Los movimientos sobre los sueldos de los futbolistas habrían tenido un efecto sobre el balance aprobado en octubre de 2021 de 27 millones de euros.
Como resume el ‘Corriere della Sera’, plusvalías y sueldos “oficialmente anulados y, en cambio, solo diferidos, habrían maquillado las cuentas”. En 2020 “se declararon unas pérdidas por 209 millones en lugar de 222, con un patrimonio neto positivo de 28 millones en lugar de un patrimonio neto negativo de 175 millones”, y en el año anterior “pérdidas por 89 millones en lugar de 230 y un patrimonio neto de 239 millones en lugar de 47″.
Según las acusaciones, entonces, se trataría de manipulación de valores y facturaciones falsas para operaciones inexistentes. Los 16 investigados (entre ellos, la Juventus, el presidente Andrea Agnelli, el vicepresidente Pavel Nedved, el exdirector deportivo Fabio Paratici y el consejero delegado Maurizio Arrivabene) ahora tendrán 20 días para presentar un escrito de contestación o pedir nuevos interrogatorios. El juez de instrucción, después, decidirá si llevar el caso a juicio.