Los autos de lujo de los rusos llenan el aeropuerto de Helsinki, paso “obligado” para volar al resto de Europa
Ante el veto de vuelos desde Rusia desde el inicio de la invasión a Ucrania, y para evitar un largo trayecto con escalas, muchos prefieren conducir sus modernos coches hasta la capital finlandesa, donde los dejan estacionados hasta su regreso
Al comenzar la guerra, la Unión Europea cerró su espacio aéreo a los aviones de Rusia, lo que obliga a los rusos que quieren viajar a Europa a cruzar la frontera o tomar una ruta tortuosa viajando con aerolíneas no occidentales.
Desde que Moscú eliminó las restricciones de viaje ligadas al COVID en julio, se ha producido un auge en el número de viajeros rusos y un creciente descontento en Europa por la autorización de entrada de turistas rusos en plena guerra en Ucrania.
Un paseo rápido por el estacionamiento del aeropuerto de Helsinki revela decenas, si no centenares, de coches de alta gama con matrícula rusa, como un nuevo Mercedes-Benz S-class sedan o un Porsche 911 Turbo S.
“Esto me supera. Preferiría que no viniesen antes de que se resuelva la situación con Ucrania”, confiesa a la agencia AFP un viajero finlandés Jussi Hirvonen tras salir del garaje.
Consultado por la AFP, el ministro de Relaciones Exteriores Pekka Haavisto confirma que Finlandia se ha convertido en “un país de tránsito” para los turistas rusos.
¿Una decisión europea?
A raíz de la creciente insatisfacción con el turismo ruso en medio de la guerra en Ucrania, Finlandia anunció la semana pasada que limitaría las visas de turista rusas al 10% del volumen actual a partir del 1 de septiembre.
Pero los rusos “vienen aquí con visas Schengen emitidas por muchos países diferentes y continúan su ruta a través del aeropuerto de Helsinki”, explica Haavisto.
Casi dos tercios lo hacen con una visa Schengen emitida por un país como “Hungría, España, Italia, Austria, Grecia y España, (que) se encuentran entre los principales países emisores cada año”, dice a la AFP Mert Sasioglu, portavoz de los guardias fronterizos finlandeses, aludiendo a una encuesta realizada por su colectivo en agosto.
Las normas Schengen no permiten que Finlandia cierre su frontera a nacionalidades específicas, explica el ministro de Exteriores.
Este tipo de sanciones solo pueden ser decididas de forma conjunta por la Unión Europea.
“Dado que Finlandia y los países bálticos planean restringir estas visas, sería bueno que los países de la Unión Europea tomen decisiones similares”, agrega Haavisto, que lo planteará en la próxima reunión de ministros de Exteriores de la UE el 30 de agosto en república Checa.
Su idea es compartido por muchos finlandeses en el aeropuerto. “Debería haber una decisión de la Unión Europea para cerrar la frontera”, dice Hirvonen.
‘Enfoque coordinado’
Mientras, el número de turistas rusos que viajan a Finlandia sigue creciendo.
“Todo el mundo debería poder viajar. Nosotros vemos cómo viven los demás países pacíficos y eso nos hace pacíficos”, asegura Pavel Alejin, atleta profesional ruso de camino a un festival de bicicleta en Basilea.
Para el turista ruso Vadim wan der Berg, la situación es “muy difícil”, ya que muchos ahora no tienen la oportunidad de viajar en avión por trabajo o estudios. “Todos estamos esperando que esto termine, queremos una situación normal en todo el mundo, en nuestro país y también en Ucrania”, asegura.
La Comisión Europea dijo la semana pasada que se está planteando un “enfoque coordinado” sobre las visas rusas.
Países de Europa del Este como Letonia, Lituania y Polonia dejaron de emitir visas de turista a los rusos hace meses y Estonia planea impedir el paso a los rusos con visado emitido por otro país de la UE.
El canciller alemán, Olaf Scholz, tienen ciertas reservas. “Esta no es la guerra del pueblo ruso, esta es la guerra de Putin”, dijo, considerando que limitar las visas de turista también penalizaría a “todas las personas que huyen de Rusia porque no están de acuerdo con el régimen ruso”.