El puesto maldito de Boca: 13 duplas centrales en 38 partidos en 2022
Zambrano-Roncaglia debutó contra Patronato y repetirá el sábado frente a Platense. Antes, jugaron otras 12 parejas...
"Riñón de plástico, calcula mal", lo apodó Cristian Traverso a Carlos Zambrano, en medio del análisis del partido de la defensa de Boca contra Patronato y al ver cómo al peruano lo pasó por arriba un pelotazo largo que parecía controlado. Claro, un riñón de plástico no tiene cálculos.
Más allá del apodo picante y fuera de lugar de Traverso, la realidad es que Boca en general viene sufriendo mucho defensivamente y que la zaga central en particular no da pie con bola, con la derrota en Paraná como la peor actuación de todas. Incluso, con los tres que recibió en el último encuentro, el Xeneize se convirtió en el equipo más goleado de la Liga Profesional con 19 goles en contra en 11 fechas.
El problema no es menor y en cierta forma puede estar relacionado a la mala fortuna que viene teniendo el Xeneize desde principios de este año con los marcadores centrales, casi como si fuera un puesto maldito. Tanto que la dupla conformada por Zambrano y Roncaglia, que hizo su estreno ante Patronato y repetirá este sábado contra Platense, es la 13ª en salir a la cancha en 38 partidos jugados durante 2022. Y no poder afianzar una pareja de centrales siempre es un dolor de cabeza y atenta contra la solidez de un equipo.
Boca arrancó el año con una pareja consolidada como Izquierdoz-Rojo, con siete partidos consecutivos hasta la fractura de Cali en un dedo del pie. A partir de ahí, de esa primera lesión, los problemas se sucedieron sin parar. Más lesiones y las suspensiones en la Libertadores...
En esos meses siguientes, pasaron también por la cueva: Figal-Ávila, Zambrano-Rojo, Figal-Rojo, Zambrano-Ávila, Aranda-Rojo, Aranda-Ávila, Ávila-Rojo, Aranda-Zambrano, Figal-Zambrano, Izquierdoz-Zambrano y Figal-Izquierdoz.
Recién sobre el final del primer semestre, con la vuelta de Izquierdoz-Rojo, el equipo de Battaglia recuperó la solidez defensiva y se encaminó hacia el título de la Copa de la Liga y la clasificación a los octavos de la Libertadores con un gol recibido en ocho partidos.
Desde el salto de Hugo Ibarra de la Reserva a la Primera, Izquierdoz fue colgado y decidió irse, la apuesta por Zambrano-Rojo no funcionó, llegó la lesión del nuevo capitán, y el último domingo debutaron Zambrano-Roncaglia en Paraná, con serios problemas defensivos. Repetirán el sábado en la Bombonera ante Platense. Prueba de fuego. Para evitar que se venga la dupla número 14...
