Los 'hombres de Koeman' le han dado 17 puntos al Barça

Los goles de Memphis han supuesto 11 y los de Luuk de Jong, seis. Los dos fueron solicitados por el técnico holandés. "Menos mal que los pedí", ironizó la semana pasada.

Juan Jiménez
As
Zarandeado desde muchos sectores y despedido de mala manera en el viaje en avión de vuelta de Madrid el pasado mes de octubre tras perder en Vallecas, al final Ronald Koeman sí había dejado ciertas cosas buenas en el Barça. Cada vez se descubren más. Supo manejar e implicar al Messi post-burofax en el proyecto de la temporada pasada cuando al inicio de la misma casi ni quería ir a entrenar, levantó una Copa del Rey, se atrevió con Pedri y Ansu y, ya esta temporada, con Gavi y Nico. No sólo eso. Sus tan criticados fichajes, sin ser cracks, han terminado por serle muy útiles al Barça de Xavi.

Los goles de Memphis Depay y Luuk de Jong han supuesto 17 puntos para el Barça en lo que va de temporada. La aportación del ex jugador del Lyon (11) ha sido la siguiente: un punto ante el Athletic (1-1), dos contra el Getafe (2-1), un punto ante el Alavés (1-1), dos contra el Espanyol (1-0), dos ante el Elche (1-2) y dos ante el Mallorca (2-1). Mientras, Luuk, que ha 'donado' seis puntos a Xavi, ha marcado sus goles de esta manera detallada: Mallorca (2), Granada (1), Espanyol (1) y Levante (2). Los tantos contra los pericos y los granota, además, sobre la hora.

Xavi se ha deshecho en elogios hacia los dos. A Luuk de Jong lo ha calificado como ejemplo. El jugador cedido por el Sevilla aceptó con profesionalidad la decisión de Mateu Alemany de buscarle una salida en enero, medida que compartía Xavi. Una vez frustrado el intento de segunda cesión (venía del Sevilla, que tenía que estar de acuerdo en la operación) siguió trabajando y el esfuerzo le dio resultado. "Menos mal que lo pedí", ironizó Ronald Koeman la semana pasada. Luuk de Jong ha aumentado su valor de mercado con los goles que ha hecho y su prestigio como buen profesional también se ha disparado.

Memphis es un caso parecido. Lesionado en Múnich después de hacer un buen inicio de temporada en el que sólo falló en los partidos grandes, parecía desconectado y fuera de las rotaciones principales del grupo. Pero como dijo Xavi, entrena "como una bestia" y recibió su premio con una titularidad ante el Mallorca que, al contrario del día del Cádiz, sí aprovechó con un gran gol y un partido en el que fue, con diferencia, el elemento más peligroso y dinámico del Barça en ataque. Un partido que, seguramente, le permita estar en el once contra el Betis si Xavi se mantiene firme en valorar la meritocracia de la que tanto habló cuando llegó al Barça.

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