JUVENTUS 2 - INTER 4 / El Inter deja a la Juve sin títulos

Los nerazzurri levantaron su octava Copa de Italia tras una espectacular final con dos remontadas. La Vecchia Signora, sin trofeos por primera vez desde 2011.

Mirko Calemme

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El Inter levantó su octava Copa de Italia tras una inolvidable final ante la Juventus, logrando un triunfo histórico por varias razones. Era desde 1965 que un Derbi de Italia no protagonizaba la final de la competición y, además, con esta victoria los nerazzurri dejaron sin títulos a los bianconeri por primera vez desde 2011. Tras 19 trofeos, la mejor racha de la historia juventina se ha terminado definitivamente.

Los de Inzaghi tomaron la iniciativa con enorme intensidad y abrieron la lata con una espectacular rosca de Barella en el 7’. El tempranero gol despertó gradualmente a la Juve, que creció hasta tomar las riendas del choque.

Antes del descanso, Danilo tuvo que abandonar el césped por un problema muscular y en su lugar saltó al campo Morata, que en el comienzo de la reanudación desvió al estilo Pippo Inzaghi un disparo desde la izquierda de Alex Sandro y empezó la remontada. En el 53’, un pase al hueco de Dybala puso a Vlahovic solo delante de Handanovic, que neutralizó el primer intento del serbio, pero no pudo hacer nada ante el segundo. Con todo a su favor, la Juve cometió un error garrafal: encerrarse atrás. Allegri puso un defensa más (Bonucci en lugar de Bernardeschi), y el Inter empezó un asedio sin pausas. En el 80', Lautaro cayó en el área peleando el balón con De Ligt y Bonucci. El árbitro pitó penalti y Calhanoglu, desde los 11 metros, no falló.

Se llegó así a la prórroga, con la inercia toda a favor de los milaneses, que remataron rápidamente la faena. El trencilla, esta vez gracias al VAR, concedió otro penalti por un contacto entre De Ligt y De Vrij, que materializó Perisic. El croata, poco después, terminó un contragolpe con un potente zurdazo que se coló por la escuadra, el tanto de la sentencia. Allegri, enfurecido, peleó con el banquillo rival por sus festejos, y fue expulsado. Sin él, la Juve no supo reaccionar más y la fiesta interista empezó con 15 minutos de antelación.