El secreto de Ibrahimovic para esquivar la retirada del fútbol a sus 40 años

El delantero del Milan cuenta con una dieta saludable, impuesta por un chef francés, que se ha convertido en su obsesión diaria para seguir ligado a este deporte.

Julio Botija

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La carrera de Zlatan Ibrahimovic parece que no tiene límite y a sus 40 años la retirada no ha rondado por su cabeza a pesar de sus últimas lesiones de rodilla. El secreto del ‘Benjamin Button’ del fútbol, como así se define, para mantener su forma física y sus goles no se encuentra en el terreno de juego. La clave para resistirse en la élite de este deporte reside en una alimentación saludable constante y diaria.

La alimentación, su obsesión

El inicio de este cambio radical en su nutrición data de su etapa en el París Saint-Germain gracias a Joel Robuchon, ilustre chef francés que falleció hace tres años, que le impuso una dieta centrada en la ingesta de verduras frescas, frutas, pescados y carnes blancas a la brasa. También, las grasas saludables y los carbohidratos, sin exceder la cantidad, son recomendados en este régimen alimenticio.

Por el contrario, el azúcar está totalmente prohibido en su día a día, al igual que las pizzas y hamburguesas a no ser que se trate de algún día especial, según desveló el periodista Guillem Balagué a la ‘BBC’. Desde que conoció al cocinero francés en su etapa por el Parque de los Príncipes, siempre ha tenido un nutricionista dentro del club que vigile su dieta, ya que en países como Inglaterra o Estados Unidos, no controlan la alimentación de sus jugadores.

Por ello, está vida saludable iniciada por el chef Robuchon se ha convertido en su obsesión diaria y su secreto más preciado para esquivar la retirada. Incluso, según hizo público ‘The Guardián, dicha nutrición está muy controlada por él mismo mediante el cálculo exacto de los alimentos que ingiere y cuyo objetivo es que siempre su peso corporal se encuentre entre los 92 y 95 kilogramos.

Las otras ‘armas’ de Ibra

Las artes marciales, exactamente el taekwondo, se convirtió en su “primer amor deportivo”, según confesó. De hecho, sigue practicando este deporte que le garantiza una mejora en su elasticidad muscular y así evitar lesiones habituales en su edad. Además, según reportan sus redes sociales, las patadas voladoras contra el saco de boxeo y los movimientos acrobáticos justifican que es cinturón negro de la Federacion Italiana en su primer periplo por Milán. Ese vínculo con las artes marciales se ha asociado en sus goles con remates imposibles que está al alcance de muy pocos.