Se cierra la puja por el Chelsea
Ya no se escucharán más ofertas por el equipo inglés. Más de 20 grupos inversores han hecho propuestas para hacerse con la entidad.
Dos semanas después de la invasión de Rusia a Ucrania, el gobierno británico terminó sancionando a Roman Abramovich por sus vínculos con el presidente ruso Vladimir Putin el pasado 10 de marzo. Downing Street congeló todos los activos del magnate, incluido el Chelsea, que ahora tendrá que encontrar un nuevo dueño.
El primer consorcio que hizo público su interés fue el formado por el Todd Boehly y Hansjorg Wyss, quienes se asociaron con el británico Jonathan Goldstein, además de una extensa lista de reconocidos consejeros.
Será una disputa muy reñida con su compatriota Nick Candy. El empresario es un gran aficionado al Chelsea y trabaja con la leyenda Gianluca Vialli para comprar el club bajo el nombre "Blue Football Consortium". Además, a última hora, se unió a su proyecto el grupo surcoreano Hana Financial Group, lo que les ha convertido en los grandes aspirantes a ser los propietarios.
Por detrás aparecen los Ricketts, dueños de los Chicago Cubs (MLB) y Woody Johnson, accionista mayoritario de los New York Jets (NFL). Este último habría lanzado una oferta de 2.400 millones de euros por el Chelsea. La misma cantidad ofrecida por Aethel Partners, una entidad financiera ubicada en Londres que ha anunciado que que tiene disponibles 60 millones de euros para cubrir los gastos inmediatos del club.
Sin embargo, el grupo con más capacidad económica es el Saudi Media Group. Con un capital cuperior al billón de euros, este consorcio saudí tiene detrás a Mohamed Alkhereiji, otro seguidor del Chelsea cuya oferta por el equipo habría superado los 3.000 millones de euros. Si bien el Raine Group no ha puesto grandes impedimentos a la procedencia del capital, este grupo todavía podría encontrarse con obstáculos.
Coe y Terry, la voz del pueblo
Además de las numerosas y cuantiosas ofertas de los inversores extranjeros, dos leyendas del deporte británico han alzado su mano para entrar en la puja. El primero es Lord Sebastian Coe, atleta legendario, miembro del partido conservador y aficionado al Chelsea que se habría aliado con Sir Martin Broughton, antiguo presidente del Liverpool, para comprar el Chelsea. Su oferta contaría a su vez con el apoyo de un banco de inversión llamado Evolution Media Capital.
Coe no está solo en esta cruzada y John Terry es el otro exdeportista que quiere comprar las acciones del equipo del oeste de Londres. El que fuera defensor del Chelsea, junto a otros inversores, habría ofrecido cerca de 300 millones de euros para hacerse con una parte significativa del club, con el objetivo de dar voz a los aficionados. De ahí que el nombre del consorcio se conozca como "True Blue" (auténticos azules).