Los señalados por la tensión del vestuario del United
El nuevo técnico Rangnick es incapaz de lidiar con un vestuario dividido. Varios jugadores se quieren marchar, otros terminan contrato y no renovarán.
Varios jugadores no ayudan a disipar este ambiente. La prensa británica señala que hasta un tercio de la plantilla del United está pensando en marcharse y no está comprometido con el club. Pese a los intentos de Rangnick por darles confianza, son futbolistas que se ven fuera. Es el caso de Martial, Van de Beek o Dean Henderson. El técnico ha intentado hacerles ver que su situación es volteable, pero el discurso no cala. Eric Bailly se va a la Copa de África y tampoco se le ve motivado tras la llegada de Varane.
Además de ellos, los tres jugadores que terminan contrato tampoco piensan en seguir. Cavani, Pogba y Lingard, por diferentes razones, están pensando más en lo que les deparará el futuro que en el presente. Y eso que Rangnick dijo que el uruguayo se queda hasta final de temporada, a pesar de que había gente que le veía fuera en este mercado de invierno.
A todo esto, las palabras de McTominay y Luke Shaw después del partido ante el Wolverhampton diciendo que el equipo "no estaba unido" han demostrado aún más la división del vestuario. Algunos teóricos titulares como Rashford, Maguire, Sancho y Wan-Bissaka están en un pésimo estado de forma.
Todo ello hace que Cristiano se cabree y que De Gea pague su frustración con él. "El ego de Cristiano puede dificultar que Rangnick le convenza. Prefiere guardar su energía para los grandes momento. De vez en cuando le veremos correr tras la pelota, y los hinchas del United lo vitorearán, pero son flashes", escribió el exjugador Chris Sutton en Mail Sport. Una guerra civil en el United que puede tener consecuencias nefastas.