Mercedes, mal perdedor con dos apelaciones tras la carrera

La FIA rechaza dos quejas interpuestas por el equipo de Toto Wolff. Hamilton no compareció en rueda de prensa. Amargo octavo título de constructores.

Jesús Balseiro
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Inmediatamente después de la carrera, dentro de la ventana de media hora que permite el reglamento, Mercedes puso dos reclamaciones a la FIA. Una, recurriendo al artículo 48.8, porque Verstappen adelantó a Hamilton en el periodo de coche de seguridad por un tiempo ínfimo, motivado porque Lewis ralentizó su coche sensiblemente. Otra, apelando al 48.12, porque hubo coches que no se desdoblaron antes de la resalida del ‘safety car’, así que los alemanes juzgan que la carrera no debió relanzarse. Sobre las 22:20, hora local, los comisarios denegaron la primera, por breve e irrelevante.

Para la segunda queja, fue Red Bull quien adelantó de forma privada que tampoco se había admitido alas 23:00 horas. Los comisarios argumentaron que si bien el coche de seguridad se retiró con coches aún por desdoblarse, es potestad del director de carrera ordenar su marcha y una vez se emite el mensaje 'safety car in this lap', este debe retirarse en cualquier caso.

Un abogado acudió al circuito para asistir al equipo Toto Wolff. "Nosotros no tenemos, venimos a correr", dijo un irónico Christian Horner. Cuentan con Helmut Marko, abogado de formación, aunque a la vista con los comisarios acudieron el propio Horner y Adrian Newey, la plana mayor de Red Bull, para zanjar cualquier polémica y festejar con todas las de la ley el título de Verstappen. Mercedes confirmó después su intención de apelar la decisión.

Saltándose otra parte del reglamento, Lewis Hamilton no compareció ante las televisiones tras el podio y tampoco participó en la rueda de prensa oficial de la FIA, en la que sí estuvieron Max y Carlos Sainz. Igualmente, se canceló la conferencia que Toto Wolff tiene habitualmente tras la carrera con la prensa escrita. Caras largas en el hospitality, posiblemente también en el garaje, para un equipo que logró este domingo su octavo título de constructores consecutivo, estirando una racha que nadie había firmado antes en la Fórmula 1. Al final, será cierto que el campeonato de fabricantes no vale de mucho sin el Mundial de pilotos.

El coche de seguridad que eliminó de golpe la ventaja de Hamilton (unos once segundos) y permitió a Verstappen salir pegado tras él con gomas nuevas decidió el Mundial de 2021 y enojó a Wolff, muy crítico en los mensajes a Michael Masi (director de carrera) que la retransmisión coló durante la carrera. Antes, tras la salida, fueron Horner y Verstappen quienes protestaron que Lewis no devolviera la posición a Max tras atajar por el interior cuando este le había adelantado. 

"Nunca nos rendimos"

Este final, encendiendo los aspersores para retrasar la fiesta de Red Bull, no empaña una enorme temporada de Hamilton, que ganó ocho carreras y mereció una novena que le habría proclamado campeón del mundo. Se sobrepuso a un rival capaz de todo en verano y recortó una desventaja que hasta en dos ocasiones pareció insalvable. Al bajarse del coche, el inglés no fue tan crítico, quizás aún en shock por los lances del final de carrera: "Antes de nada, enhorabuena a Max y a su equipo. Creo que hemos hecho un trabajo increíble este año. Todo el mundo en la fábrica, y también aquí en la pista, hemos trabajado muy duro. Ha sido la temporada más difícil y estoy muy orgulloso de ellos y también agradecido por haber sido parte de este viaje. Dimos todo y nunca nos rendimos". La duda ahora, ver cómo encaja el varapalo deportivo una estrella de la F1 que tiene su palmarés resuelto y muchas ambiciones fuera de la pista. Rosberg hizo la espantada una vez. Hamilton tiene contrato con Mercedes en 2022 y 2023.

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