Frenazo de Valverde

El uruguayo sigue sin estar al 100% de su esguince en la rodilla y está prácticamente descartado para Granada. Completan la enfermería Bale y Ceballos.

Jorge C. Picón
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El regreso de Fede Valverde tendrá que esperar. El uruguayo no se encuentra recuperado al 100% de su esguince en el ligamento lateral de la rodilla izquierda, lesión que sufrió en el Clásico contra el FC Barcelona del pasado 25 de octubre. A pesar de que las sensaciones han sido positivas durante este parón de selecciones, en el que ha estado entrenando a diario en Valdebebas, hoy no ha podido reincorporarse al grupo y es más que difícil que pueda estar preparado para enfrentarse al Granada el domingo (16:15, Movistar LaLiga).

Se trata de una baja sensible para Ancelotti, siendo el Pajarito uno de los futbolistas más utilizados por el italiano durante el primer tramo de temporada. Ha sido titular en 10 de los 12 partidos en los que ha estado disponible, disputando un total de 908 minutos (el 84% de los posibles). Sin embargo, como ya le sucedió el curso pasado, esta lesión ha cortado su buena dinámica. Aquella vez fue una fisura en la espinilla que le hizo perderse un mes, más o menos el mismo tiempo que estará lejos de los terrenos de juego esta temporada. Sin embargo, en esta ocasión se quiere evitar cualquier recaída en forma de problema muscular, algo que sí sufrió el jugador el año pasado.

Junto a Valverde, completan la enfermería Gareth Bale y Dani Ceballos. El primero, en el ojo del huracán después de regresar tocado de Gales, se ha ejercitado en el interior de las instalaciones de la Ciudad Deportiva. Se trata de un problema en el sóleo y no tiene, de momento, fecha de regreso. Lo mismo sucede con el sevillano, que avanza en su recuperación, pero todavía tiene un largo camino por delante. Entrenó en solitario sobre el césped, algo habitual en los últimos días, pero que seguirá haciendo durante un tiempo.

Los que están recuperados y apuntan a la lista de Ancelotti para Granada son Rodrygo y Mariano. Ambos completaron la sesión a la par del grupo, dejando atrás sus respectivas lesiones. El primero tenía una pequeña dolencia muscular, mientras que el segundo una fractura de nariz. En el caso del hispano-dominicano, si juega, deberá hacerlo con una máscara protectora con la que se está ejercitando para evitar golpes.

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