De «tergiversar» a ser «de oposición», el Gobierno despliega ataque a los medios
Cuando fue consultado sobre cuáles son esos medios que forman parte de esa “corporación”, la autoridad agregó: “Son los opositores al Gobierno, son los que de forma diaria hacen críticas desde hace meses y meses”, luego lanzó los nombres: Página Siete y El Deber.
Tres días después, el 29 de agosto, el canciller Rogelio Mayta también se estrelló contra los medios, a los que acusó de ser “actores de oposición” y aseguró que “tergiversan” información. Mayta citó a los dos anteriores medios y a Los Tiempos.
“Hay que ser muy claros, los bolivianos mínimamente nos merecemos ser honestos entre nosotros y hay medios de comunicación que son la oposición, son actores políticos de oposición”, declaró el Canciller para quien los medios “creo que ya no tienen que tratar de esconder su posición política: son oposición a este Gobierno”, por la cobertura a la sesión extraordinaria de la OEA, que según él, fue una “manipulación” para mostrar una derrota del Gobierno.
La ANP responde
La Asociación Nacional de la Prensa (ANP) se pronunció el domingo sobre los ataques del canciller Mayta, quien acusó a algunos medios de ser “actores políticos de oposición”. La institución recordó que están vigentes en Bolivia los derechos constitucionales de expresión, de prensa y de opinión.
“La ANP lamenta profundamente las declaraciones, vertidas en diferentes momentos y a varios medios de comunicación, del portavoz, del Procurador General y del Canciller, que pretenden identificar a los diarios independientes como actores políticos”, reza el comunicado.
La ANP reafirmó que Mayta “no puede atribuirse una función opositora a medios que ejercen el derecho constitucional de difundir información ‘interpretarla, analizarla y comunicarla libremente…’, como señala el artículo 21 de la Carta Magna”.
Los ataques no cesan
Unas horas después del comunicado de la ANP, el procurador general del Estado, Wilfredo Chávez, atacó a los medios por presuntamente tergiversar la información en torno a la auditoría de la OEA. Ayer, la conductora de la Red Uno consultó sobre los argumentos expuestos ante el Consejo Permanente de la OEA, que sólo se recibió el apoyo de tres países, pero inmediatamente el Procurador respondió: “Otra mentira de ustedes”.
La periodista lo frenó: “Me permito interrumpirle, Procurador, para pedirle que guardemos el respeto”. “Déjeme hablar” retrucó la autoridad, para afirmar que el fin de la sesión no era lograr apoyo sino para denunciar la “injerencia” de Almagro.
Chávez no fue el único. Ayer, el ministro de Justicia, Iván Lima, se refirió a la ANP y atacó por su lado también a la prensa.
“Tomamos las palabras de la ANP. Página Siete, El Deber y Los Tiempos tienen que hacer un ejercicio independiente con todas las garantías de libertad de expresión, pero también de manera responsable”, sostuvo Lima, según una nota oficial del ministerio. Según la autoridad, “al revisar los editoriales de esos medios y sus portadas, es evidente la amplificación que dan a la señora (Jeanine) Añez y la invisibilización a la situación de las víctimas (de las masacres) y sus familias. A ellos no se les da cobertura, se los revictimiza y además se los ataca”.
Gremios responden
Ante las declaraciones de Richter, Mayta, Chávez y Lima, el ejecutivo de la Asociación de Periodistas de Cochabamba, David Ovando, ratificó que “la libertad de expresión no se negocia un solo milímetro. No hay periodismo de izquierda o de derecha, no hay periodismo del pueblo o del imperio. Aquí hay periodismo independiente basado en la libertad de expresión”.
Pidió además al Gobierno que cumpla las recomendaciones del GIEI Bolivia (Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes) de “reforzar las garantías institucionales, administrativas y judiciales para proteger la libertad de prensa”.
El vicepresidente de la Asociación de Periodistas de Santa Cruz, Marco Curi, demandó al Gobierno respetar el Artículo 106 de la Constitución Política del Estado (CPE) que garantiza el derecho a la opinión, expresión y a la información, y atribuyó los ataques a la prensa, porque el sector “es para el Gobierno, la ‘piedra en el zapato’. Por eso pedimos unidad, para defendernos con la Ley de Imprenta”.
En ese mismo tono se expresó en La Paz Antonio Vargas, dirigente de la Asociación de Periodistas, quien aseveró que no se puede atribuir a la prensa una función opositora u oficialista. “Convendría que nuestros gobernantes consulten el artículo 21 de la Constitución que garantiza la libertad de prensa y de expresión. Rechazamos enfáticamente esa apreciación que se tiene de los medios”.
4 AUTORIDADES
del Gobierno atacaron a los medios en los últimos cinco días tras la sesión de la OEA, en la que participó Bolivia.
“No hay periodismo de izquierda o de derecha, no hay periodismo del pueblo o del imperio. Hay periodismo independiente basado en la libertad de expresión”.
David Ovando, Cochabamba