De las 5,2 MM de Sputnik contratadas, Bolivia sólo recibió 1,2 MM en siete envíos
La cantidad mencionada por Blanco a Red Uno representa apenas el 23,75% del total de inmunizantes solicitados al Fondo Ruso de Inversión.
La demora en la entrega del compuesto se debe a que Rusia —país productor de la Sputnik-V— prioriza la inmunización de su población; razón por la cual las exportaciones y contratos con otros países se vieron afectados.
Sin embargo, en abril el propio presidente Arce, el viceministro Blanco, y el embajador del país euroasiático, Mikhail Ledenev, garantizaron que la entrega del total de las vacunas sería a más tardar en junio, el mes pasado, lo que nunca ocurrió.
Las 1,2 millones de dosis de Sputnik-V llegaron al país en siete envíos, el primero de los lotes entregado el 28 de enero de este año, cuando se dejó en el país 20.000 dosis para el personal médico de primera línea.
En marzo debían llegar 1,7 millones, no obstante, al verse imposibilitado de cumplir con los pedidos, se decidió por pedir envíos en lotes más pequeños.
El 14 de abril llegó el segundo cargamento, de 25.000 dosis rusas; el 20 de ese mes llegó un lote de 200.000 unidades. En la primera quincena de mayo, llegó el cuarto lote, con una carga de 400.000 dosis.
En junio llegó un remanente de 100.000 dosis de la entrega anterior. Por último, el 11 de julio se hizo la entrega de un lote de 500.000 primeras dosis y 27.000 segundas dosis del compuesto ruso.
Bolivia continúa a la espera de las dosis complementarias de la Sputnik-V, cuyo tiempo de espera para la segunda dosis fue ampliado ya en dos ocasiones, la primera de 21 a 90 días, y la segunda de 90 a 180 días.
Mientras tanto, en algunos puntos de vacunación ya se registraron protestas, hay descontento en la población e incluso bloqueos de calles para exigir la aplicación de las segundas dosis del compuesto elaborado por Gamaleya.
