Cómo será el vuelo de Jeff Bezos al espacio y por qué será histórico
El multimillonario se subirá a su propia nave, la New Shepard de su empresa Blue Origin, el próximo 20 de julio, a 52 años de la llegada del hombre a la Luna. Será el primer viaje de este tipo sin astronautas, totalmente comandado por civiles
Así lo anunció hoy el fundador de Amazon, quien el 20 de julio planea llegar al espacio en la nave New Shepard de su empresa Blue Origin junto con su hermano y otros tripulantes, cuyos nombres hasta el momento se desconocen.
“Ver a la Tierra desde el espacio te cambia. Cambia tu relación con el planeta, con la Humanidad. Es una Tierra. Quiero ir en este viaje porque es algo que he querido hacer toda mi vida Es una aventura, es algo grande para mí”, dijo en la publicación de Instragram en la que anunció el viaje.
“Lo que Jeff Bezos va a hacer es un vuelo parabólico, es un vuelo suborbital”
“Lo que Jeff Bezos va a hacer es un vuelo parabólico, es un vuelo suborbital, que asciende hasta 90/100 kilómetros de altura y vuelve a la Tierra. Todo en alrededor de 20 minutos”. El periodista especializado en historia y tecnología espacial Diego Córdova detalló a Infobae que “en la cápsula van a ir cuatro pasajeros”.
El cohete New Shepard, que debe su nombre al astronauta Alan Shepard, quien fue el primero en hacer un vuelo suborbital en mayo de 1961, “hará una parábola y regresará a la Tierra, no llegará a dar una órbita completa”, explicó Córdova.
Y si bien señaló que “la cápsula no se llegará a poner en órbita”, destacó que “van a ver la curvatura de la Tierra y por un momento van a estar ingrávidos”.
“Van a ver la curvatura de la Tierra y por un momento van a estar ingrávidos”
“La noticia es que la nave va a estar plenamente tripulada por civiles. Se hizo hace poco un vuelo de prueba sin seres humanos, pero el primero va a ser el del 20 de julio”, resaltó el referencia a la hazaña que se llevará a cabo a 52 años de la llegada del hombre a la Luna. “Si lo logran, va a ser el primer vuelo espacial tripulado totalmente por civiles, sin astronautas”.
Bezos abrirá el camino para lo que parece será un año cargado de aventuras de este tipo. En septiembre, se prevé que despegue una nave de SpaceX en otro vuelo integrado 100% por civiles que planean quedarse entre cuatro y cinco días en el espacio.
SpaceX es el nombre con que se conoce a la empresa estadounidense de fabricación aeroespacial y de servicios de transporte espacial Space Exploration Technologies Corp., fundada en 2002 por Elon Musk.
Acerca del turismo espacial
Lo que más sobresale del vuelo de Bezos es que el magnate se suba a su propia nave, en una especie de “voto de confianza” en lo que a turismo espacial se refiere.
El turismo espacial tiene 20 años y nació cuando en abril de 2001 el multimillonario estadounidense Dennis Tito pagó USD 20.000.000 a Rusia para pasar una semana en su estación espacial.
“Atrás de Tito vinieron otros que pagaron su asiento; en total nueve personas abordaron la nave Soyuz de origen ruso, que actualmente se usa para relevo de las expediciones”, contó Córdova, quien resumió: “De 15 años a esta parte, el sector privado irrumpió en la actividad espacial y la NASA llamó a empresas, por ejemplo, para el relevo de astronautas en la estación espacial”.
En 2011 -continuó-, “cuando se discontinuó la flota de transbordadores -Discovery, Atraltis y Endeavour-, los astronautas estadounidenses comenzaron a ir a sus expediciones en la Soyuz rusa. La NASA pagaba 90 millones a Rusia cada asiento, hasta que se decidió a convocar capitales privados”.
“El turismo ya aporta capitales privados a la actividad espacial; ya hay empresas que se dedican a esto”
Desde mayo de 2020 los relevos de astronautas se hacen en la Crew Dragon de SpaceX y la NASA ya no requiere de los servicios de Rusia.
Las novedades de este año continuarán en octubre, cuando el país soviético envíe en su Soyuz MS19 a la Estación Espacial Internacional a la actriz Yulia Peresild y el director Klim Shipenko a filmar escenas de El Reto, lo que será la primera película filmada en el espacio.
“El turismo ya aporta capitales privados a la actividad espacial; ya hay empresas que se dedican a esto y el aporte de dinero demuestra que la actividad privada de a poco reemplaza a las agencias especiales -analizó Córdova-. Los privados incursionaron en la actividad, primero con la premisa de bajar costos y relevos para astronautas y ahora con el turismo espacial, con cuyas ganancias se sigue invirtiendo en investigación”.
La cápsula ubicada en la parte superior del cohete que abordará Bezos cuenta con grandes ventanales y puede transportar hasta seis personas. Blue Origin no informó hasta el momento quiénes serán los otros pasajeros, pero se está desarrollando una subasta para conseguir un preciado boleto. Actualmente, la puja supera los 2,8 millones de dólares y continúa en aumento.
El cierre de ofertas de la subasta está previsto para el 10 de junio. Dos días después, se realizará una ronda final online y en directo entre los participantes ya inscritos. Luego se hará el anuncio del ganador. La suma recaudada será donada a una fundación creada por Blue Origin, destinada a alentar a los jóvenes a trabajar en el sector científico.