Los giallorossi, sufriendo contra un gran Ajax,
lograron el pase a las semifinales de Europa League. Son la única buena
noticia del desastroso curso internacional de los equipos del Calcio.
Los de Ten Hag tomaron las riendas del juego desde el principio, quedándose con el balón la mayor parte del tiempo y creando varios peligros en el área de Pau López. El español, héroe del partido de ida, volvió a tener bastante trabajo y neutralizó un intento de Tadic tras una buena jugada de Klaiber desde la derecha, aunque en el comienzo del choque un mal pase suyo causó una oportunidad para Klaassen, bien parado por Diawara.
Los holandeses comenzaron la reanudación con Brobbey en lugar de Antony y el futuro punta del Leipzig, que ya se hizo notar en el partido de ida, abrió la lata con una vaselina recibiendo un pase largo de Schuurs en el 49'. Ahí empezaron los peores diez minutos de la noche para los italianos, que sufrieron bastante y en el 57' encajaron también el 0-2, realizado por Tadic tras un rechace de Pau López.
Era el posible tanto de la clasificación para los visitantes, que sin embargo debieron interrumpir sus celebraciones. El
VAR le señaló al árbitro una falta de Tagliafico sobre Mkhitaryan en la
jugada, y, una vez revisadas las imágenes, el trencilla solo pudo
cancelar el gol.
La buena noticia despertó a los romanisti, que en el 72' lograron el tanto de la tranquilidad. El joven Calafiori (18 años) con una gran carrera y una finta se deshizo de Timber y con un centro raso encontró en el corazón del área a Dzeko, que empujó el esférico entre palos sin apuros. El Ajax buscó hasta el pitido final el 1-2 que le habría llevado a la prórroga, pero los italianos supieron defenderse sin pasar por otros sustos. A Fonseca, que siempre se tomó muy en serio la Europa League, en las semifinales le espera otro grande: el Manchester United.
