La brutal ironía del ministro de Salud de Paraguay por el impacto de la pandemia: “El ataque zombie es lo único que nos falta”
“Es muy difícil”, reconoció Julio Borba sobre los “incendios diarios que hay que apagar” por el colapso sanitario que sufre el país
InfobaeEl agravamiento de la pandemia del COVID-19 en Paraguay ha puesto en jaque al sistema sanitario, algo que el ministro de Salud Julio Borba ilustró con una brutal ironía en una reciente entrevista.
“El ataque zombie viene después, es lo único que nos falta”, bromeó Borba en un reportaje de la radio Monumental cuando le consultaron qué problema seguiría a la falta de medicamentos, la escasez de oxígeno y la lentitud en la llegada de las vacunas. Y luego completó su respuesta: “No... mira, estamos trabajando por lidiar con todo los problemas que van saliendo. Estamos viendo cómo solucionar el tema de vacunas. Estamos lidiando con el tema del oxígeno. Estamos trabajando día a día. Son incendios diarios que tenemos que estar apagando, con todos los problemas que tenemos en el ministerio de Salud. Es difícil. Es muy difícil”.
Las proyecciones del Ministerio de Salud de Paraguay apuntan a que los fallecidos por covid-19 alcanzarían los 5.485 en la tercera semana de este mes de acuerdo con un promedio esperado de 7,22 muertes diarias por millón de habitantes.
Asimismo, el Ministerio informó el jueves en su página que para ese periodo se podría llegar a los 271.500 contagios, previsiones que según el ente corresponden a la “situación crítica que vive el país”. En ese sentido, la cartera indicó que el promedio diario de nuevos infectados es de 1.825, mientras que también se observa un aumento sostenido de internaciones que “muestran un repunte desde inicios de febrero”.
Paraguay, con siete millones de habitantes, acumula hasta la fecha 4.644 muertes, tras las 60 reportadas la noche del jueves, y un total de 229.595 contagios desde que hace un año se detectó el primer caso. El mismo balance señaló 2.479 positivos en un día, así como un total de 2.964 internados, 438 en unidades de terapia intensiva.
Las consultas y las internaciones en las salas respiratorias e intensivas han sobrepasado desde hace semanas las capacidad de la red sanitaria pública, de las más atrasadas de la región, lo que la ha llevado a derivar pacientes a centros privados.
Al respecto, representantes de la Asociación Paraguaya de Enfermería se movilizaron el jueves hacia la sede del ministerio para exigir que se garanticen medicamentos para el personal de salud y pacientes, así como contratos para mejorar el servicio.
El Ministerio informó el jueves que el consumo de oxigeno se ha quintuplicado en los hospitales durante la pandemia, pero aclaró que la demanda está cubierta. Sin embargo, algunos medios locales informaron de falta de suministros de oxígeno en varios hospitales públicos.
El país sudamericano está en vías de completar la vacunación del personal de salud, tras lo cual pasará acomenzar la inmunización los adultos mayores, después de que el jueves se liberaran las 100.000 dosis donadas por India que aguardaban para su uso el referente de una autoridad reguladora regional.
Las vacunas producidas en India son la mayor partida llegada al país, considerando que solo ha recibido 36.000 dosis de los 4,3 millones adquiridos a través del mecanismo Covax.
Tanto la situación hospitalaria como el retraso en la llegada de las vacunas provocaron el mes pasado protestas en Asunción exigiendo la renuncia del presidente del país, Mario Abdo Benítez, del conservador Partido Colorado.
En esas protestas se recordaba al mandatario que su Gobierno tuvo un año para reforzar con inversiones el sistema sanitario, con unas debilidades históricas que se han desnudado más con la pandemia.