Tuchel y su "lugar oscuro"

El ahora técnico del Chelsea ha reconocido que lo pasó mal tras la eliminación a manos del United en la Champions de 2019. "No era capaz de hablar con nadie".

As

Todo son sonrisas en lo que a Thomas Tuchel se refiere en estos momentos. El alemán ha cambiado la cara del Chelsea y no conoce la derrota desde que ocupase el puesto de Frank Lampard. La última muestra de la buena marcha del equipo fue el 0-1 con el que superaron al Atleti en la ida de octavos de la Champions. Sin embargo, en la misma competición, pero dos años atrás, su estado de ánimo era muy diferente. Y es que el 12 de febrero de 2019, un penalti en el descuento en el Parque de los Príncipes convertido por Lukaku dejaría al PSG compuesto y sin cuartos de final.

En la ida, los parisinos habían ganado 0-2 en Old Trafford, por lo que la eliminación fue una tremenda sorpresa y un jarro de agua congelada en forma de 1-3 del cual Tuchel no pudo resguardarse. Este domingo (17:30 horas, DAZN) volverá a verse las caras con el United de Solskjaer y con motivo del reencuentro ha recordado cómo se sintió tras la debacle sufrida. "Si soy completamente honesto, después del partido estuve durante dos días en un lugar muy oscuro. No era capaz de hablar con nadie ni de pensar en nada que no fuera esa derrota", reconoce.

El problema principal no fue la eliminación, si no la forma en la que se produjo. "Puede ser la peor derrota que he experimentado, porque llegó de ninguna parte. Fueron las circunstancias que la rodearon. No he vuelto a experimentar nada igual ni antes ni después de ese momento. Cómo llegamos ahí, la presión alrededor del club, la historia anterior y el resultado del primer partido. Y la forma en la que todo se sucedió en el segundo partido, con el VAR decidiendo en el último minuto", añade Tuchel.

"Como fue por sorpresa fue difícil de asimilar el golpe, pero como he dicho, fueron solamente dos días en un lugar oscuro. Después les di a los jugadores dos días libres y creo que fue lo mejor para todos. Después de eso, puedo decir que en los deportes hay que levantarse y aceptar las derrotas es a veces necesario para crecer...", reflexiona el del Krumbach. Un Tuchel que superó el golpe y a punto estuvo de recibir la recompensa completo, pero un cabezazo de Coman le robó el premio final.

Aprender de la adversidad

"Eso puede herir, pero la recompensa llegó un año después, fue casi perfecto. Llegamos a la final (de la Champions) y pasamos por un largo camino para conseguirlo. Lo logramos luchando con la adversidad y eso es lo que te hace más fuerte, como suele decirse", finalizó. Queda claro que esa eliminatoria la tiene el entrenador del Chelsea grabada en la menta, aunque ya no se encuentre en ese lugar oscuro que se convirtió en hogar durante dos días. Ello ha convertido en los encuentros entre Tuchel y el United en algo especial y seguro que mantener la racha de partidos sin perder viva es una motivación extra para imponerse a los Diablos Rojos.

El sudoku a resolver con Havertz

Kai Havertz es el jugador mejor pagado de la plantilla del Chelsea, con un sueldo de unos 18,8M de euros. Un salario astronómico si tenemos en cuenta el cuestionable rendimiento del futbolista, completamente eclipsado por futbolistas como Mason Mount o Edouard Mendy. "Desde que llegué, lo único que le impidió hacer un gran impacto es su lesión, nada más. Veo a un tipo comprometido, veo a un tipo que tomó la valiente decisión de mudarse al extranjero a una edad temprana y salir de su zona de confort y aceptar un gran desafío en un gran equipo, en la Liga más grande". Havertz estuvo en el banquillo durante la victoria por 1-0 del martes ante el Atlético de Madrid en la Liga de Campeones. Ahora Tuchel tiene que resolver el sudoku del Chelsea con su compatriota, que fue utilizado en distintas posiciones con Frank Lampard, incluso como número 10, pero también en el mediocampo y por la banda en ocasiones.

“Encontraremos este papel y ahora tenemos que darle el tiempo necesario. Pero él está listo, estamos muy contentos de que esté de vuelta en la plantilla y no hay duda de que va a levantar nuestro potencial ofensivo. Es un jugador único. No está tan claro dónde necesita asentarse. Hoy, diría que está entre la posición de nueve y un 10, algo intermedio. Está muy cómodo en el área, está muy cómodo en posiciones altas", dice el técnico del Chelsea. De momento, ha disputado 27 partidos, ha marcado cinco goles y ha repartido seis asistencias. La misión de Tuchel en el banquillo blue es recuperar al soldado Havertz...