Investigan si un funcionario del departamento de Justicia intentó manipular los resultados electorales en favor de Donald Trump
La cartera inició una pesquisa interna luego de que distintos reportes indicaran que Jeffrey Clark, encargado de asuntos civiles, intentó junto al ahora ex presidente forzar la salida del secretario interino Jeff Rosen, quien se había negado a apoyar sus denuncias infundadas de fraude durante los comicios
El inspector general del DoJ, Michael Horowitz, anunció la pesquisa luego de que artículos de prensa implicaran a Jeffrey Clark, jurista encargado de los asuntos de derecho civil del ministerio, en esfuerzos de esa naturaleza.
The Washington Post y The New York Times indicaron que Trump, que denunció sin pruebas haber sido objeto de un fraude que lo privó de un segundo mandato, conspiró a principios de enero con Clark para intentar tumbar al secretario interino de Justicia Jeffrey Rosen, que se negó a seguirlo en su cruzada contra los resultados de la elección.
En la misma línea se había expresado el secretario de Justicia William Barr, quien había sido un firme aliado de Trump. A principios de diciembre el funcionario afirmó públicamente que, en contraste con las declaraciones del presidente, no había encontrado evidencia de fraudes masivos durante los comicios. Barr dejó su puesto poco después.
Según indicaron los reportes de los medios, la idea del plan era que Rosen fuera reemplazado por Clark para que el departamento de Justicia se negara a certificar la victoria del demócrata Joe Biden en el estado clave de Georgia.
El entonces presidente habría desistido ante la amenaza de renuncias masivas dentro de la cartera, agregaron los periódicos. No obstante, aún si los esfuerzos hubieran sido fructíferos, bloquear la certificación de Georgia no hubiera cambiado el resultado final de los comicios: el estado otorga 16 votos electorales y Biden se impuso por una diferencia de 306 contra 232, por lo que el mandatario actual hubiera ganado por 290 a 248.
Trump intentó a lo largo de la transición revertir los resultados de Georgia de otras maneras. A principios de enero, The Washington Post reveló una grabación en la que el mandatario presionó al secretario de Estado republicano del estado para que “encuentre” suficientes votos para ese propósito. “Todo lo que quiero hacer es esto. Sólo quiero hallar 11.780 votos, que es uno más de los que tenemos”, afirmó Trump. “Porque ganamos el estado”, dijo.
La investigación iniciada por Horowitz busca determinar “si funcionarios actuales o pasados del departamento incurrieron en acciones inapropiadas” con el fin de modificar el resultado de las elecciones, señala un comunicado. El líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, había pedido al funcionario que investigara las supuestas actividades, a las que calificó de “atento de sedición”.
La pesquisa no se extenderá “a otros funcionarios del gobierno”, dijo el inspector general, lo que implica que no se extenderá a Trump ni sus funcionarios en la Casa Blanca.
Clark, por su parte, rechazó la veracidad de los reportes publicados: aseguró en los medios que sus intercambios con Trump habían sido “dentro del marco de la ley” y que la información publicada era equivocada.
Las denuncias de fraude de Trump -replicadas por la mayoría del partido republicano- no convencieron a los tribunales pero sembraron dudas en la mente de millones de sus partidarios, al punto que miles de ellos lanzaron un asalto al Capitolio el 6 de enero, cuando el Congreso certificaba la victoria Biden.
Este asalto, que dejó cinco muertos, llevó a los demócratas a impulsar un nuevo juicio político contra Trump por “incitar a la insurrección” y que tendrá lugar en febrero.
En paralelo, cientos de sus partidarios que invadieron la sede del Poder Legislativo están siendo efectivamente acusados por esas acciones, y funcionarios del departamento de Justicia anticiparon que algunos podrían enfrentar cargos de sedición.