Cómo hizo Israel para vacunar a dos millones de personas en tres semanas
Está entre los tres países que más dosis ya logró suministrar a sus ciudadanos y en un cómodo primer puesto si se toma en cuenta el porcentaje de la población inoculada
Durante el fin de semana se dio a conocer la información de que, como parte del acuerdo entre Pfizer e Israel, a cambio de las millones de dosis de vacunas, el estado proporcionará al laboratorio acceso a numerosas bases médicas de datos con información sobre las personas que reciben la vacuna. Israel, en efecto, acordó funcionar como un laboratorio de experimentación global, y los hallazgos sobre su público se utilizarán para determinar estrategias de vacunación en otros países y ayudar a la compañía a avanzar en la investigación de vacunas contra el coronavirus y otros medicamentos y tratamientos.
¿Qué datos médicos posee Israel sobre sus ciudadanos?
La respuesta a esto está basada en la historia del sistema de salud israelí. El país almacena los registros médicos de sus ciudadanos, desde que nacen hasta que mueren. Los ciudadanos israelíes están obligados por ley a comprar un seguro médico de uno de los cuatro grandes proveedores de atención médica pública para que cada bebé que nazca en el país y cada inmigrante que llegue tenga un registro médico que incluya todas las vacunas que se les administraron, todas las enfermedades que sufrieron, todos los procedimientos a los que fueron sometidos, cada medicamento que se les recetó, una lista detallada de alergias y sensibilidades.
¿Cuál es el valor de contar con los datos de quienes recibieron la vacuna?
Los datos confiables y de alta calidad son una materia prima valiosa. En el estado actual de la atención médica, quienes poseen los datos configuran una parte clave del proceso, ya que son esos datos los que proporcionan la base para el desarrollo de nuevos medicamentos y tratamientos. Los avances logrados en los campos de la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático (ML, por las siglas en inglés de Machine Learning) durante la última década configuran una revolución en la atención médica digital. Los desarrollos se produjeron en dos frentes principales: la capacidad de analizar imágenes y la posibilidad en consecuencia de sacar conclusiones sobre el estado del paciente.
¿Qué tiene de especial el sistema de salud israelí?
El sistema sanitario local es administrado y controlado por un conjunto limitado de entidades coordinadas. A diferencia de otros sistemas de atención médica en todo el mundo, que cuentan con cientos de aseguradoras, proveedores de servicios de salud, médicos privados y un sistema descentralizado de hospitales, clínicas y farmacias, Israel cuenta con un sistema de salud centralizado y funcional.
¿Por qué los fabricantes de vacunas están interesados en los datos médicos israelíes?
La combinación de tres factores -un sistema de salud que cubre al 100% de los ciudadanos, una masa crítica de datos médicos completos y el hecho de que Israel es esencialmente un “Estado insular” con fronteras selladas- lo convierte en un excelente escenario de pruebas para los productores de la vacuna contra el coronavirus. La constatación de que se puede monitorear a cada receptor de la vacuna, con acceso a su historial médico completo, alentó a Pfizer y Moderna a enviar millones de dosis al país, incluso a expensas de otros países clientes.
¿Qué prometió Israel a Pfizer a cambio de la rápida entrega de las dosis?
En un comunicado emitido por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyhau, la semana pasada, se dieron a conocer parte de los detalles del acuerdo entre el Estado y la farmacéutica estadounidense. Según el escrito, como parte del acuerdo, se estableció que Israel serviría como caso de estudio mundial para la vacunación rápida de todo un país. Explicó que por eso la empresa aceleró la entrega de dosis y aumentó la cantidad. Israel, según el primer ministro, “compartirá con Pfizer y con toda la humanidad sus datos estadísticos que ayudarán a desarrollar una estrategia para vencer al COVID-19. Podemos hacerlo porque nuestro sistema de salud es uno de los más avanzados del mundo”, expresó.
Netanyhau no detalló qué datos son precisamente los que Israel compartirá con Pfizer, pero su declaración generó preocupaciones entre los defensores de la privacidad con respecto a la confidencialidad médica con la que están comprometidas todas las Organizaciones de Mantenimiento de la Salud israelíes (HMO, por sus siglas en inglés). ¿Se llegó a un acuerdo a espaldas de los ciudadanos en el que se intercambiaba información médica por vacunas? ¿Se está vendiendo la privacidad de los residentes en favor de una implementación acelerada del plan de vacunación?
En una declaración posterior emitida por el Ministerio de Salud, se sostuvo que los datos proporcionados solo incluirían información macro del tipo de la que se proporciona a diario al público con respecto a la propagación de la pandemia.
¿El sistema de salud israelí comprometerá la confidencialidad médica de sus ciudadanos a cambio de vacunas?
“Estamos monitoreando constantemente los resultados de la campaña de vacunación. El seguimiento incluye cifras generales sobre las tasas de infección -número de contagios, pacientes graves, total de fallecidos y total de vacunados. Estos son datos vitales para comprender el impacto real de las vacunas en la propagación de la pandemia. Son detalles que se comparten con el público a diario y la misma información se proporcionará a Pfizer”, señaló en un comunicado el Ministerio de Salud.
¿Qué planea hacer Pfizer con los datos médicos que le proporciona Israel?
Según informes en los medios israelíes, Pfizer consultó con la Organización Mundial de la Salud y con otros jefes de Estado, y sus representantes estudiaron de cerca el sistema de salud israelí. Se les concedió acceso al sistema interno del Ministerio de Salud y al Centro de Información de COVID-19 en el país. Según los informes, los expertos de Pfizer quedaron impresionados por el nivel de cooperación interministerial y el trabajo del Mando del Frente Doméstico de las Fuerzas de Defensa de Israel en lo que respecta a la realización de pruebas diagnóstico por COVID-19 y a su transferencia de datos. Asimismo analizaron de cerca la estructura del sistema de salud y la función de las HMO.
Israel funcionará como un caso de estudio global y las conclusiones servirán para establecer estrategias de vacunación en el resto del mundo. El país se comprometió a proporcionar a Pfizer los datos recopilados explícitamente para ese propósito, incluida la efectividad de la vacuna, los efectos secundarios y el tiempo que lleva desarrollar anticuerpos de acuerdo con la edad, el sexo, el historial médico y otros factores.