Una voluntaria cuenta los efectos secundarios de la vacuna de Pfizer
Una enfermera, participante voluntaria en los estudios clínicos de Pfizer en Estados Unidos, cuenta los efectos secundarios que tuvo al ser tratada con la vacuna.
Para salir al paso de ellas, Kristen Choi, una enfermera que participó en los ensayos del fármaco de Pfizer y BioNTech, ha publicado su experiencia en The Journal of the American Medical Association.
En el artículo, Choi cuenta que el único efecto secundario que tuvo la inoculación de la primera dosis fue el dolor en la zona del pinchazo. Sin embargo, la segunda dosis sí produjo efectos más considerables, como frío, náuseas y mareos. Al día siguiente, la fiebre llegó hasta los 40,5 grados. Alarmada, se puso en contacto con los responsables del ensayo, que rápidamente la tranquilizaron asegurando que era una reacción normal. La fiebre duró solo 24 horas.
“Cuando vi la fiebre tan alta, me alarmé y pensé que podía estar contagiada. Pero poco más tarde me di cuenta que es una reacción frecuente tras vacunarse”, declaró la enfermera a Business Insider.
“Mereció la pena”
Kristen Choi, a pesar de las “poco placenteras” 24 horas de malestar, asegura que volvería a participar en los ensayos de una vacuna “sin dudar”.
Los efectos secundarios padecidos por la enfermera forman parte de la respuesta del organismo para que reconozca un agente externo y sea capaz de batirle cuando este intente entrar en el cuerpo. La vacuna de Pfizer no está compuesta de virus atenuados, sino que contiene material genético, ARN mensajero, que aporta la información necesaria al sistema inmunológico para que elabore una respuesta contra el virus.
Los principales efectos experimentados por los voluntarios durante los ensayos clínicos fueron inflamación en el lugar del pinchazo (84%), fatiga (63%) y dolor de cabeza (55%). Por su parte, la fiebre experimentada por Choi, solo fue sufrida por un 14% de las personas vacunadas.
“No hay que tener miedo de los efectos secundarios, porque son una señal de que la vacuna funciona y de que tu cuerpo se está preparando para enfrentar el virus”, concluye Choi.